viernes, 11 de diciembre de 2009

Cambio





Por un instante me pareció que la calma y devenir de agrado eran eternos. No obstante en un momento, tal impresión mudó rápidamente hacia la sensación de que algo ascendía en mis sentidos y emociones hasta explotar en una tormenta de Ira.

La semblanza de mis acompañantes, apenas percatados de tan rápido cambio sólo expresaba la sorpresa y desde mi propia percepción me veía arrastrado en una suerte de caudal que impedía cualquier reacción distinta al mandato de aquél contingente de fuerza incontrolable.
Lo que ocurrió entonces es parte de la expresión etérea de; conciencia, sueños y naturaleza vital que mezclados en un sin fin de puntos gestaron una conducta de viscisitudes y expresiones que emergieron como liberados por un extraño conjuro, que aguardaba justo el momento para cumplirse.
Extraño sortilegio que definía una presagio por cumplirse desde lejanos tiempos y remotos espacios.

En un instante devino la calma no sin recordar mis estados previos y constatar cual paso de un huracán los efectos de mi voluble conducta.

Así aquella tarde sufrí la vivencia más sensible y cambiante en apenas un momento. Todo en uno, uno en la diversidad, sin exculpación ni menos la búsqueda de culpabilidad.

Marché entonces, con algo más de certeza y un tanto más de incertidumbre que se integraban a mi esencia en un juego gracioso y a ratos ebullente…….

miércoles, 9 de diciembre de 2009

Encuentro



Presiento mientras avanzo que algo no ha variado, en un instante como si nada vienen a mí los recuerdos, simples evocaciones de un ayer inescrutable mientras me detengo a observar la gran ciudad con sus luminarias destellantes. Mientras, el camino recorrido, ese de antaño, de juegos, destrezas y aventuras desfila ante mi memoria sin poder evitar la conmoción de tiempos tan distantes y cercanos…

Nuestros pactos y alianzas ante los monstruos de la televisión que poblaban nuestro mundo infantil de manera total, nuestros diálogos de largas horas entre la complicidad y el silencio de una sociedad secreta, ese viaje a Machu Piccu en el verano del 2000, recuerdos, ebulliciones tectónicas, sismos que emergen sin dar tregua a mi presente desde la profundidad anónima de lo inconsciente.

- Evocaciones, entre sueños, anhelos y promesas-

De pronto un eco misterioso, el simple cantar, el bullicio disfrazado de voz, con cantos de encuentros pasados; ¡Hermano!, siento tu cercanía en medio del despliegue de sensaciones dispersas, flotantes y lejanas…

Parte de la historia, cualidad particular expresada en el sentimiento de lo esencial, esa significación que desata el vínculo primero, destello de imágenes de sentido y contenido hacia un otro ignorado pero no desconocido… Eres parte de esa rama que se despliega hacia el futura, entramándose y proyectando tus secretos con actos, palabras, progenie y la misma vida con sus polos de inicio y partida.

Todo ello, penetrando, escarbando y arraigándonos en las raíces de nuestros antepasados, cual semilla de generación, palpitos y sentimientos encapsulados en cada personalidad.

Música, bullicio, algarabía; -¿Lo sientes?- ha vuelto nuevamente el recuerdo, nuevamente como antes y como ayer, más mis calles ya no están, la cercanía con los instantes se evaporan, se dispersan, simplemente se marchan. No obstante, en cada rincón nuevamente esperan su oportunidad para emerger a la vida, esa vida de suave brisa, del mar, del momento, de nuestro tiempo, en cada época y que intentamos permanentemente descubrir dentro de nosotros mismos, cuales cateadores, exploradores de misterios hacia la nada y el porvenir avizorado hace mucho, mucho tiempo……..

lunes, 7 de diciembre de 2009

Música Ancestral




El sonido se expandía en intervalos de ritmo lento, en cada paso que avanzaba hacia el ocasional músico, su sonido impactaba en mi interior despertando extrañas evocaciones.

No era la música altisonante de tambores o la melodiosa sinfonía desplegada a través de un piano. ¡No!, era algo elemental, simple disposición ante una fuerza de significado indescriptible que se adelantaba y alternaba en mis oídos.

El enigmático sonido tendía a desplazarse en diversos niveles, ascendiendo y bajando en frecuencias diversas, más la sensación me traslaba a otro tiempo a un instante de encuentro, de preguntas y llamados ancestrales en medio de un horizonte de representaciones dispersas.

Imposible de evadir nos acercamos con mi mujer ante aquél personaje mescla de "rasta" o un criollo "artesa" de mis tiempos y procedimos a consultarle por el instrumento que tocaba y que nos había desviado hacia aquella esquina del metro Manuel Montt a preguntar por los misteriosos sonidos que de el emanaban.

Amablemente nuestro entrevistado respondió; - es un Didgeridoo o Yidaki,un instrumento de conexión espiritual.....

Sorprendido por aquél insospechado obsequio de la ciudad de cemento y bullicio no pude sino agradecer a nuestro músico ocasional y al sincronismo que hizo coincidir aquella tarde nuestro paso por dicho lugar.....

Más allá de la monotonía, encontrabamos la riqueza oculta bajo las capas de smog, apatía y agreste perspectiva de ciudadanos urbanos. Más allá de todo la energía espiritual volvía a emerger desde donde sólo basta un par de oídos atentos para dicha oportunidad y encuentro.......

http://es.halavideos.net/playing+the-vIdEoto3Ju_H0AcM.html