viernes, 30 de diciembre de 2011

El último día

La mirada extraviada de pronto se activó en el sujeto que caminaba en aquella área de condenados.



Por un instante, volvió en sí y se podría decir que su rostro había sufrido una extraña transmutación y demostraba una resplandeciente armonía, difícil de encontar en similar lugar...


Enfiló en medio de pasajes hasta llegar a un patio central y allí lanzó un grito liberador luego prosiguió su camino perdiéndose en medio de una maraña de cemento....


Mientras, dos individuos observaban dicha conducta desde un rincón y la comentaban con un dejo sorpresa.


Nuevamente González celebrando , -señaló el tuerto-

-¿Celebrando, pero qué?- añadio el rucio

-El último día- indicó el primero...

No me digas que este se va- ¿cumple condena acaso?, espetó el segundo-

No hombre, así celebra Gonzalez el último día de cada año, no olvides que este tiene condena perpetua....

Luego, dejando de lado el incidente, volvieron a lo suyo, estafas por celular y otras timas de pillos menores , que era en realidad la pasión de ambos........

jueves, 29 de diciembre de 2011

Instante

Apenas un instante suspiró, para luego volver a sumergirse en ese sueño de letargo que llevaba a la fecha 7 años, desde que una tarde acudió a su habitual siesta para no volver a levantarse.

En la misma pieza, la ciudad, en el mundo las cosas habían cambiado, sin embargo nada de aquello le competía, pues sólo su cuerpo inerte, literalmente se encontraba allí, en cambio su ser habitaba desde hace mucho en lejanas comarcas de ensueño sin espacio ni tiempo……….

lunes, 26 de diciembre de 2011

Dubitaciones en el Camino

Camino en forma decidida, el paso se acelera en la medida en que me sumerjo en ese mar de personas que van y vienen en dirección diversa. Unos entrando, otros saliendo de esa gran fauce de construcción artificial que emula a la caverna primigenia, la transición al mundo de luz y oscuridad. El metro es modernidad en transporte, más evoca distintas percepciones al momento de transitar por sus laberintos hacia destinos subterráneos y de cauce telúrico.

No obstante hay algo más, algo que en definitiva agrega nuevos condimentos a esta experiencia, simple imaginación dirán algunos más allí está la idea que se plantea, surge y prospera en mi caminata hacia el rumbo escogido. Idea antiquísima que se encarna en observación , reflexión y luego en pensamiento y expresión. Los pasajeros y caminantes por alguna razón enigmática me parecen conocidos; ¿reflejo de un tiempo pasado, quizás ido que se actualiza en este otro tiempo llamado presente?.

Así por ejemplo una muchacha de pelo ondulado y largo junto a su ropaje me parece asombrosamente familiares, lo mismo una anciana que camina, al niño que juega de la mano de su madre e inclusive el hombre obeso que a paso lento delinea su marcha en medio de una oleada que emerge del carro. Una escena reiterada, un tiempo que no es sino imaginación, mera ilusión y que permite la misteriosa continuidad de un modo mucho más estable que lo que imaginan los predictores de la sociedad.

Es cierto que alguien puede espetar que todo cambia y desde allí afianzar sus defensas de la variabilidad más extrema, empero, ¿Qué hacer?, ante la transición de las formas y estilos que se sumergen y luego reaparecen como el sol y la luna sino validar que bajo la sutileza del cambio se encuentra una dinámica de inmanencia que nos dispone frente a una suerte de escenario que si bien goza de retoques e inclusive de modificaciones arquitectónicas, encontramos finalmente la obra en pleno, sustentada y expresada como un mensaje de retorno, el eterno retorno que trae a nosotros el recuerdo de lo experimentado, lo vivido y vivenciado como algo mucho más cercano y fresco de lo que pensábamos hasta ahora….

Todo ello ocurre curiosamente, en este viaje evocador en donde el contacto con el mundo subsole y subterra se instala en este medio de transporte como algo cotidiano, emulando con ello en nuestro inconsciente la experiencias remotas que arraigadas persisten en una memoria ancestral y abriendo desde allí una perspectiva que aunque flotante logra penetrar en la mera vivencia rutinaria.

No sólo los rostros y vestuarios me parecen conocidos, muchos aspectos parecieran brotar, simplemente exponerse sin pudor ante mi persona y acercarse con rostro de viejos conocidos. En efecto, en una esquina una pareja de fiel romance es la misma encarnación de los amantes eternos de la historia, más allá una manifestación de multitudes se expresa tributaria de tantas revueltas con la violencia contenida, la intolerancia por su lado no es menos expresiva que en el pasado, asimismo el pillaje de antaño encarnado en tretas y lenguaje desenvuelto capturan a nuevos ingenuos en el ahora, el fanatismo que vuelve a idolatrar a Tiranos como divinidades e inclusive el rostro pasivo de quienes han claudicado y sólo esperan sin más , me es conocido. Me siento entonces hermanado con el clásico integrante de la asamblea, aquél que lanzó a los cuatro vientos el “Nihil Novum Subsole”..

Las preguntas me embargan y no se detienen;- ¿Seré un ser ajeno?-, ¿Acaso un hombre demasiado viejo, como para reconocer las triquiñuelas del olvido?, que cual Leteo priva de memoria a la humanidad en una ilusión de tiempos nuevos, cambios y reformas que no logran sino reiterar la presencia de la rueda que gira permanentemente con sus niveles estimados en cada instante-

Una sensación de angustia me recorre, es curioso que ello no logre ir más allá, pues si bien cada escena resulta una simple evocación, un recuerdo de aquello ido, empero en esto mismo radica que también se renace como las flores en primavera, trayendo la esperanza del reencuentro con todo aquello que ha partido, así cada instante es una oportunidad de actualizar la experiencia acumulada por milenios en nuestra especie y por siglos inclasificables del entorno universal.

Así, todo surge como posibilidad, pues como ha sido así será, inclusive que esta manifestación sea la misma que me llevó en un tiempo primigenio a preguntarme por doquier; ¿Para que Buscar? y que una tarde recibió como respuesta, un simple: Ven y Verás que aún retorna a mi memoria, en constante alegoría de motivos diversos en este viaje de recuerdos, reencuentros y devenir por la vida....

jueves, 22 de diciembre de 2011

Sensación

Ninguna voz es oída; aquí en la soledad
Sólo la existencia como testimonio
Leve sensación de esperanza
Como el aroma de la flor perdida
Simple enunciado, propuesta de imaginación
Que enarbolada en mí ser, se constituye en presencia

Entonces, emerge la sutil compañía
Aquella que en la ausencia te arroba, con melodías extraviadas
¿Dónde están los acordes?
Misterio de expresión en soledad
Muchos han hablado de ella
Empero la presencia es vana
Para aquellos que anhelan su captura
Pues como el agua que escurre entre dedos
Se ha delineado su camino

Prosigo la marcha en medio de la ausencia
Aquella que brota de mi recuerdo
Más en el silencio, va naciendo una nueva sentencia
La de transitoriedad
Como vertiente invertebrada
Sonrisa de verano, nieve en invierno

El aleteo de las aves juega con las nubes
Mientras, el silencio se transforma en realidad
Que invita a trascender sin temor
Así transcurre la sonrisa
Como el canto del pueblo, que transita lentamente
Tras la colina perdida del mañana

miércoles, 21 de diciembre de 2011

Superhéroe

El superhéroe resulta una figura clásica en la literatura contemporánea, siendo un agente constante de expresión en los denominados comics y de allí a los medios audiovisuales de masas. Su presencia se evidencia en una variada gama de personajes, quienes cuentan con particulares dones que los diferencia de los ciudadanos comunes y corrientes, esto si bien marca un quiebre también constituye un nexo entre los representantes y el entorno que los alberga. Lo anterior quizás como una suerte de proyección de cualidades anheladas y arraigadas en el inconciente colectivo de la comunidad que clama por ellos..

De forma curiosa la transmutación a héroe apela a una iniciación, revelación o entrega de poderes superiores, los que se disponen al servicio del bien, he allí la principal descripción que podemos realizar del superhéroe moderno. En el curso del siglo pasado se constata una tendencia a la revelación o a una suerte de acceso a poderes mediante experiencias relacionadas con la ciencia (En el primer caso se encuentra el ejemplo de Superman y en el segundo una zaga que va desde los cuatro fantásticos, el hombre araña, Hulk, entre otros) de tal forma se activa un registro de realidad que se construye mediante la revelación de lo secreto al estilo iniciatico de los grandes héroes de la humanidad o en la capacidad de mediación del poder de la experimentación científica que viene a reemplazar a la antigua potestad de la magia como eje de poder derivado de la búsqueda por el hombre para el hombre.

Tanto como el proceso, resulta interesante reconocer que el entorno juega un rol significativo en la expresión y aparición del superhéroe. Habitualmente dicho ambiente está precedido por el imperio del pillaje, inexistencia de la ley o simplemente una amenaza latente que sumerge hacia la comunidad bajo un yugo de tiranía e impotencia para estos. Lo anterior, es un elemento significativo pues se constata la unidad de un contexto determinado y el personaje, de esta forma la conciencia de la masa huérfana pareciese plasmarse en una proyección capaz de encarnar un ser concreto, para responder ante la adversidad indomable y aberrante.

La historia de personajes con cualidades especiales y distintivas no es algo nuevo, más bien lo que constatamos aquí es la íntima unidad con nuestra extensa tradición de Héroes de la talla de; Aquiles, Heracles, Sansón, Ulises, Ayax, con un presente de otros como; Superman, Batman, Flash Gordon, El Fantasma, entre otros. Como sea, el desarrollo de la vivencia del superhéroe emerge como tributo hacia una secuencia de provisión de certeza ante la ambivalencia de tiempos “difíciles”…

El superhéroe asimismo no es una divinidad, es más bien una suerte de par con un lugar destacado, una suerte de elegido para mediar entre ese caos que alberga a la sociedad y defender valores perdidos, causas nobles y con ello dar batalla decididamente sin mediar consideración de otros compromisos, todo esto a fin de la realización de aquella misión a la cual se ha consagrado. Por ello, es habitual que el superhéroe posea un alter ego que permita delinear una vida hacia la cotidianeidad de manera de suplir aquellas carencias que evidencia en su calidad de personaje. En este aspecto posee una clara diferencia con el Héroe de antaño, quién simplemente era “el” y no requería de una contraparte, que le permitiese abocarse a una suerte de “normalidad”…

Lo anterior, define una línea sutil de distinción y asimismo implica una vida de permanente desafío en pos de velar por la humanidad y el futuro de esta. Una suerte de guardián tutelar, un guerrero consagrado que aboca su energía hacia un fin de trascendencia.

He referido la relevancia del proceso y asimismo del contexto en el surgimiento del Superhéroe, esto implica un aspecto vital del desarrollo de esta hebra, pues de allí deriva una íntima revelación en torno a la capacidad de búsqueda, respuesta y cambio respecto a un determinado problema. Lo anterior se enmarca en una determinada actitud, que implica la regresión de la perspectiva de solución y de nuestra propia visión de protagonismo en ello.

Si consignamos lo anterior quizás debamos reconocer que el antiguo Héroe era un colaborador y en ocasiones un liberador, versus el Superhéroe que en la actualidad ha tomado un rol mayor de Liberador y en menor grado de colaborador….

lunes, 19 de diciembre de 2011

Divagaciones de un Explorador

Entonces aclarada la mañana, me dirigí a la ciudad que todos comentaban: Tarsis, la magnífica.

Los ejemplares relatos que sobre esta urbe se realizaban, hacían referencia a una suerte de mítica región perdida. Allí en medio de tesoros y poderes inescrutables se encontraría la respuesta esperada por siglos. Tan anhelada como la guía que orienta a navegantes extraviados, desolados y olvidados por todos los que alguna vez estuvieron en su memoria. –Sé, que hablar así suena extremo, quizás una locura-, he de asumir tal denominador, pues el viaje hacia lo desconocido nunca confirma, sino más bien promete un viaje hacia el por-venir. Será por eso que en algunas regiones, dicha ciudad se asemeja con embarcaciones de aventura osada y así mismo con los misterios de la divinidad que se encuentra por revelar la nueva por venir.

De otra manera, la ciudad también se vincula con minerales, joyas preciosas, magnas gemas de iluminación, aunque algunos versados en materias del conocimiento más acabado, aseguran a pie juntillas que tal iluminación no es sino la oportunidad de sabiduría, la misma por la que optó Salomón.

Como sea, partí rumbo a la tan nombrada ciudad y para ello no hubo consideración que hiciera el debido contrapeso, pues era tal la potencia de su atracción que podríamos decir que nada había sino el eco del sonido de las voces que desde allí trascendían para llamarme a su búsqueda. El viaje comenzó de esta forma y yo peregrino de milenios, aún continúo tras mi ruta prometida, algunos de mis acompañantes han extraviado la pasión de antaño aunque en lo personal mantengo mi búsqueda con más motivación de abrazar el mensaje que aguarda en las veredas y bibliotecas que mantendría el eterno sueño.

En los periplos de caminos intrincados hemos llegado a la mismísima región de asia, tras la huella de Jonás y su embarque. Asimismo siguiendo las fuentes del historiador Heródoto nos hemos acercado a las columnas de Hércules tras la región de Tartesos como han dado de llamar algunos a Tarsis, tierras de Argantonio y los designios de misterios por descubrir, tras el curso de variados testigos que estuvieron con sus propios ojos atestiguando los más notables prodigios de aquella tierra de enigma: “un navío samio, que tenía por patrono a Colaios y que se dirigía hacia Egipto, fue arrojado fuera de su ruta a la isla de Platea; las samios confiaron todo el asunto a Corobios y le hicieron un depósito de víveres para un año. Ellos mismos, que, al partir de la isla, habían marchado con un enorme deseo de llegar a Egipto, navegaron fuera de su ruta, arrastrados por el viento del Este; y, sin dejar de soplar el viento, alcanzaron las columnas de Hércules y, conducidos por un dios, llegaron a Tartessos. Este lugar de comercio estaba sin explotar en esta época, de forma que, a su vuelta, estos samios realizaron con su cargamento el mayor beneficio que haya conseguido hasta ahora ningún griego, del que nosotros tengamos referencias exactas, si exceptuamos a Sóstrato, hijo de Laodamente de Egina, que ningún otro puede compararse con éste. De sus ganancias los samios dedujeron el diezmo, seis talentos y ordenaron fabricar un jarrón de bronce en forma crátera argólica” (la cita es del historiador Heródoto, Historias, IV, 152.).

Inclusive en las costas de Cerdeña también desembarcamos, pues allí aseguraban los navegantes que se encontraba la ciudad de los refinados minerales tornados en doradas promesas con formas indescriptibles para el simple profano…

Como sea, la tarde cae y una nueva noche se aproxima, deberemos aguardar un nuevo día para iniciar nuestra travesía hacia la tierra mencionada, quizás para algunos sea una mera anécdota de un demente extraviado en libros y testimonios de dudosa veracidad, quizás para otros menos enjuiciadores sea la realización del sueño de un viajero que no cesa de perseguir un horizonte prometido, en fin que cada cual se levante en su rol. Las posibilidades existen, -lo sé-, por ello de no mediar algún imprevisto, mañana de madrugada, cuando el viento nos acompañe junto a los sususurros de Eolo, surcaremos nuevas olas tras la tierra de las maravillas, Tarsis la magnífica, así será por siglos..…


jueves, 15 de diciembre de 2011

Sueños

En medio de un ambiente de sonidos extravagantes y acompañados de voces que se desperdigan sin cesar, sueña que trabaja laboriosamente el afanado oficinista devoto de informes y reglamentos en proceso. En medio de esta incesante faena, un sueño dentro de aquél sueño le conduce a descansar plácidamente en medio de la noche más calma. En tal reposo se imagina que un merecido descanso es la mínima recompensa para su dedicada labor. De esta forma, se deja conducir por laberintos extraños, con ensoñaciones que lo alejan sin detalle del quehacer fastidioso y rutinario, por ello cree encontrarse en la gloria del paraíso anhelado y cuando se apresta para culminar sus deleites, en ese mismo instante una voz agria que retumba en el ambiente, le llama a volver a la realidad, es el implacable capataz que le reprende por holgazanear de buena gana en vez se abocarse al trabajo asignado.



Prosigue de esta forma su labor en el sueño, el oficinista rutinario, olvidando que todo aquello, no es sino el mundo creado por su imaginación e inconciente.






Mientras, en otro sueño, en otro espacio, un complacido capataz se encuentra conforme y engalanado de cumplir tan cabalmente su vigilancia de los funcionarios de aquel lugar onírico, despertando incluso a cuanto haragán no cumpla con los mandatos ordenados ....




Así,transcurre el día, la noche y la eternidad de aquellos, un sueño dentro de otro y muchos más atados cual cadena que se enhebra en el mundo de la apariencia y realidad, que transitamos sin saber cómo ni cuando despertaremos o dormiremos.....

martes, 13 de diciembre de 2011

La soberana Estupidez IV

Al ver desde la ventana de su palacio aquella enorme nube de smog que se alzaba por toda la ciudad, la Soberana Estupidez decidió tomar cartas en el asunto. Por ello, inmediatamente dictaminó cerrarla y abrir una nueva ventana con vista a la cordillera.

martes, 6 de diciembre de 2011

El Rey Desnudo

Sorprende la reacción de las personas ante eventos que venían labrándose subterráneamente desde hace bastante tiempo y con una verdadera asonada de circunstancias que anunciaban su desenlace expreso y que sin embargo la capacidad de anticipación no logró dar cuenta de esta suerte. Sorprende asimismo esta muestra de ingenuidad ligada a la incapacidad por entender el entramado de causas y efectos que ascienden, descienden, avanzan, retroceden para finalmente consumar un hecho concreto, como producto elaborado en diversas jornadas y situaciones.

Extrañan las reacciones destempladas, desbordadas y carentes de rigurosidad ante el resultado de un manifiesto olvido por entender que nuestra sociedad y asimismo nuestra especie mantiene un vértigo de cambio y transmutación permanente. Por ello, al constatar estas manifestaciones pareciese que de la noche a la mañana se ha descubierto el fruto incubado (ante nuestras narices) durante meses e inclusive años respecto a diversos tópicos y que hoy, justamente hoy, refieren incertidumbre, asombre y descontrol.

¿Dónde estaban estos sorprendidos durante el proceso?, es la primera pregunta que surge para el observador curtido en estos episodios y que suele oler con bastante adelanto el cambio de la órbita de tendencias, demandas y conflictos.

En efecto, al visualizar los eventos de los denominados “indignados” constatamos sorpresa y perplejidad en los diversos países y gobiernos, por otro lado no lo hacen distinto los ciudadanos y gobernantes con la crisis de la política fiscal de Grecia y de otros países al borde del descalabro, similar reacción a familias que luego de sobreendeudarse se sienten atrapados por acreedores diversos y se preguntan como llegaron a tal situación o por otro lado, si indagamos en la realidad personal más cotidiana, podremos constatar similar reacción en quién descubre un aumento de peso previo desborde nutricional o agobio ante un examen en ciernes luego de pasar varias semanas en fiestas y otras faenas ajenas a ese deber .

Lo que deseo dejar patente, es que si bien nadie puede tener una “bola de cristal” con poderes de ver el futuro, si podemos intuir y más que eso razonar respecto hacia donde nos pueden llevar nuestros actos. La negación de esta facultad sólo nos inmoviliza y asimismo instala un manto de duda respecto a nuestro juicio de realidad, trasladando la esfera de la autonomía, libertad y responsabilidad en su amplio sentido al banquillo de los acusados.

Al parecer la lógica del Rey Desnudo sigue más presente que nunca, en efecto, si recordamos ese cuento clásico podremos entrever que refiere una mezcla sutil entre estafa y autoengaño. De la misma manera encontramos una necesaria dosis de simulación y normalidad social con el sello final del agregado de esa ineludible ruptura de lo establecido a través del expediente de un juicio de realidad nítido, que paradojalmente se presenta en un niño.

Es en esta historia que encontramos algunas pistas por donde enrielar el camino explicativo a la situación de crisis presente en diversas latitudes del mundo y de esa voz de victimización que niega la capacidad de asumir nuestros propios errores en tiempos de vacas gordas, sin prever el tiempo de vacas flacas, tal como la fábula de la cigarra y la hormiga.

La aceptación de responsabilidad en nuestros actos, de incorporar una conciencia activa, presente y sobre todo la capacidad de evaluar diversos escenarios podrían ser atisbos de fomentar ese “darse cuenta” a tiempo y no cuando el ferrocarril se ha descarrilado…..

lunes, 5 de diciembre de 2011

Clamor de Extravío

Cisma de abismos desolados
Extraña arquitectura de extravío
Son tus columnas los lamentos de custodia
Para miles de moradores perdidos
Sombra de ilusión
Simple letanía de anhelos
Nada impide el avance de la fusión
Nadie dice lo que debe valer
Pues el miedo se ha coludido con la tiranía
Voces altisonantes claman entre sombras
Como un júbilo de extraña exaltación


¿Cómo lograr la luz?


En medio de tinieblas de sinrazón
Con sentidos de alarde extravagante
Sólo el tiempo, sólo el devenir
Jueces como jueces del sinsentido
Nos señalarán cuan bajo hemos caído
En esta jornada de travesía y pesares

jueves, 24 de noviembre de 2011

Lectura Fantástica

Leo con agrado el libro que lleva como título “Antología de la literatura fantástica”, compendio elaborado por Jorge Luis Borges, Adolfo Bioy Casares y Silvina Ocampo.

Los textos corresponden a una selección que tiene como data 1940, allí el prólogo es extenso y precisa los recovecos de la literatura fantástica junto a los alcances casi indescifrables en la atracción a oírlas y narrarlas. Prosigue una posdata de 1965 en donde el revelador autor de la Invención de Morel, aborda ciertas precisiones y busca rectificar juicios o sentencias que a su gusto fueron excesivas o poco rigurosas en el decir. Como sea, el compilado sorprende, promete y revela con elementos constitutivos de una narrativa que busca salir de los cauces normales, aquellos de pauta consignada en la cotidianeidad.

Mantengo mi excursión de lector y aventurero, como si me preparara a viajar en la máquina del tiempo o en el ingenio sorprendente de una explicación de las mil y una noches, de este modo surgen, más bien brotan cuentos de extensión variada y que surten el efecto vital de sorprender, dislocar la línea recta en una elíptica o definitivamente deshacer las premisas para reconstruir desde las bases una nueva concepción. Desde la trama esencial se bifurcan entonces pequeñas hebras de un hilo casi invisible y que no obstante, aborda una historia dentro de otra historia, la que sin embargo implica un subsistema diferente, un universo tan ajeno a esa trama que nos permite releer con nuevos ojos esa realidad a veces gris o sempiterna que percibimos.

Edgar Allan Poe, Ryunosuke Agutawa, Thomas Bailey, José Bianco, Chiang Tzu, Lewis Carrol, Julio Cortázar, José Zorrilla, junto a tantos otros y obviamente nuestros anfitriones mencionados antes, constituyen un verdadero festín desde donde cada instante se torna en una suerte de arena movediza, sin la calibración de certezas y estructuras que acostumbramos leer de forma común…

-El escritor en busca de fama que vende su alma, el enigmático romance de un solterón con un fantasma, el aprendiz de sennin que traspasa los límites de lo esperado- y así cada historia y relato configuran esa dimensión del mundo fantástico que encontramos en cada esquina donde vayamos y que a ratos simplemente olvidamos, quizás por comodidad, quizás por mera costumbre o simplemente por la misma razón que utilizamos anteojos al perder la flexibilidad de nuestra retina. Como cada cual desee explicarse ese proceso allí también encontrará un devenir de incertidumbre que será un fino hilo de la costura fantástica…

En efecto, en este mismo instante mientras ustedes leen, alguien golpea la puerta y me despido tras la pista de un hecho sin par y que muy bien puede ser la oportunidad de ingresar por la puerta de esta historia que no se detiene y más bien avanza sin detenerse hacia esa perspectiva que nos desliga de lo construido, amén de la razón y nos deja en esa faceta de mero invitado sin saber adonde ni cuando; cual Teseo sin hilo ni Ariadna que lo socorra del laberinto de la vida………

martes, 22 de noviembre de 2011

Deriva Vital

Campo a la deriva, simple sombra
Cualquier lugar en el mundo
Simple ilusión
Senda de extravagancias iluminada
Tu rumbo se ha disgregado, en medio de la tarde

¿Dónde estás?

Las aves inician el vuelo hacia su sentida alborada
Mientras, las montañas inmóviles descansan
Parecen inertes, aunque su señal es definitiva
Sólo duermen, pues sus entrañas avanzan
Se desplazan a nuevas rutas
Porvenir de promesas indescifrable
Que sentencia el dictamen escrito hace siglos

Alegoría de símbolos, representación vital
Cada cual en su rol de máscaras
En tanto, el peregrino avanza con afanes de solemnidad
Sus convicciones le mueven, cómo las aves
Hacia una nueva alborada
Aquella descrita en las antiguas escrituras

¿Quizás simples sueños de amanecida?

Simple alucinación encapsulada en locura

¿Quién lo sabe realmente?

Los hombres avanzan cual manso rebaño
En medio del artificio de la ciudad
Lejos, muy lejos de la montaña señera
Así, cada cual cumple su ciclo
En el baile de juegos convenidos
Mañana será un nuevo día, -se escucha-
Cada cual duerme, en el afán de siglos
Cómo búsqueda señera
Simple afán de certezas labradas bajo un atardecer
Tras el camino prometido, transportados por el viento
En un soplo de vida y muerte

Travesía Ilusoria

Es tarde o al menos eso parece, afuera el ruido se expande sin control, en cambio adentro de la habitación el silencio se instala solemne.
No hay sino atisbos de voces, mera formalidad que ata a la soledad unida al sinsabor de entender que nuestro diálogo al menos hoy se encuentra derribado.

Me interrogo en la extensa sensación de vacío y no logro dar con respuestas significativas, ¿acaso debo tenerlas?, realmente lo ignoro. Todo viene de pronto, se instala y sucede, aunque nunca suele ser del todo así, pues al igual que los movimientos telúricos, existe un punto de quiebre, una fricción de encuentro y una liberación de fuerzas que desencadena todo lo demás.

Pienso en dormir, luego cambio de opinión y contemplo el atardecer, la compañía de costumbre es mera ausencia, de esta forma la sensación de pérdida se instala, aunque siempre existe la certeza, en esta ocasión también se suma la incertidumbre, pues nuestra vida se asimila a ese viaje milenario por senderos y recovecos perdidos, sin carta de navegación segura en donde la ruta se define por trazos de precisión y cálculo. –No- en este caso al menos, es un mero devenir, un tránsito, que nos depara sorpresas o situaciones inesperadas, por ello este viaje es una suerte de revelación con aquello encubierto, embozado y fiel testimonio del camino de la vida.

La pausa se torna amigable, es una arremetida de nuevos aires, cantos, sonidos y descanso que invitan a una suerte de ensoñamiento, mientras afuera sucede lo que tiene que suceder. No habrá intención de torcer aquello que debe seguir el curso predefinido, al menos por esta vez….

Extiendo mis piernas, busco una mejor manera de lograr mi estado de relajo y meditación y un susurro recorre mis sentidos, es una voz de agrado, suave, es la remembranza, el encanto de ilusión desatada que me visita en sueños, tratando de aliviar aquella pérdida temporal que me invade. Es el encanto de las ondinas del Danubio o la encantadora Pincoya de Chiloé, artífices de emociones labradas en el corazón interno, proyección del ánima extraviada que busca el reencuentro.

Mientras el viaje prosigue con sus adimentos de extraña conjunción, a lo lejos una luz cada vez más tenue se extingue para iniciar su ciclo en otras latitudes, mientras en mi tierra, la de entrañables recuerdos una luna de faz impulsiva otorga el brillo anhelado a una noche de soledad que parecía ser más oscura y lúgubre que la constatación, así la simple ilusión se desvanece en ese rayo de argento que traspasa toda certeza esperada…

martes, 15 de noviembre de 2011

Ausencia de Eurídice

He llegado al límite de mi larga travesía para encontrarme contigo, extenuantes jornadas acompañadas de tinieblas y destellos de anhelos que convertían mi desesperanza en añoranza y de esta, a la esperanza última, forjada en rudas canteras de la vida.
Simple relato de quién constata que su vida ha sido una ofrenda constante ante el devenir, simple transición de eventos que recogidos y ordenados por mis manos, son depositados en la guardería de la imaginación. De esta forma recuerdos y sucesos se convierten en materia prima para la construcción de la carta de presentación, pergaminos oblongos que sustentan mi existencia junto a lo olvidado, aquello dejado atrás y que sin embargo me acompaña como el más fiel perro, me identifica aún en mi vejez al igual que el rey de Itaca en su regreso. ¿Lo recuerdas?
-Guardas silencio solemne- mientras tu mirada permanece perdida en medio de este jardín de flores magníficas.

-No entiendo tu actitud- pues he recorrido valles, mares, desiertos y mi cuerpo ha sufrido el vaivén del tiempo, algo debiese alegrarte o al menos sorprenderte, empero ninguna de las dos alternativas resalta en tu mirada, es más tus pupilas presentan un extraño destello que me hace recordar el simple eco de la foresta…

-¡Habla, canta, grita o simplemente maldice mi ausencia!- ¿Qué ocurre contigo?, tu silueta se dibuja en medio de mi existencia, no obstante eres ausencia en presencia, ¿Qué ha sucedido con tu sonrisa?, acaso mis largas jornadas terminaron por exterminar tu cordura y ahora no soy más que un simple extraño. – No respondes- mi voz es mera ilusión, caminas en medio del prado y tus pasos resultan suaves caricias para las hierbas que sustentan tu marcha, cual alfombra de verde extensión dispuesta para la precesión de tu destino.

-¿Dónde estoy?- ¿Acaso es esto la vida o tal vez mi ruina?, siento que te observo e inclusive el dulce aroma de tu perfume se escabulle entre la brisa de la mañana hasta llegar a mi cuerpo, más todo esto pareciese ser una apariencia, un engaño de seres pérfidos que juegan conmigo al igual que lo hacen algunos truhanes con los niños del pueblo. Mírame al menos un instante y envía tu alegoría de amor acompañada de tu suave sonrisa, para dejarte en paz y abandonar esta jornada hacia nuevos tiempos y destinos….

-No hay respuesta- te extravías y comentas con otros de planes, proyectos y ese devenir que labra configuraciones caprichosas, de mi presencia en tanto apenas un instante de interrogación, como si fueras a decir algo y luego callaras. Remembranza, recuerdos idos, caminos recorridos que simplemente se traen al instante y luego se dejan ir como los cometas luminosos de china, así cual luciérnagas se van desvaneciendo en los confines de nuestra existencia sin más retorno que el despertar del anhelo…

Mientras, sigo alerta, atento a tu regreso, pues al parecer es mi designio el esperar más que encontrarte, pues paradojalmente habiendo encontrado tu presencia eres ausencia constante, simple tibieza de recuerdos latentes que no logran conectar con esa realidad que tu llamas vida y yo en tanto ; Muerte……

lunes, 14 de noviembre de 2011

Travesía por el Desierto

El silencio envolvía los sentidos, mientras las arenas se extendían de una manera particular, como si fuesen senderos de iluminadas formas, con las partículas como parte de un cosmos diverso, extendido y misterioso. Más allá, las rocas estoicas mantenían su presencia en aquél extenso escenario, como testimonio de solemne virtud, pues aunque gobernarán los hijos de Helios durante el día y los de Plutón en la noche, su permanencia indicaba que los espíritus capaces de transmutar los influjos del ambiente por los anhelos del interior, bien pueden optar por una alternativa distinta a la simple disolución sin más.

Como sea, los coloridos de dicho ámbito eran algo que iluminaba, figuras de contornos imprecisos que evocaban imágenes primordiales, un cielo límpido y sobretodo un silente aviso de que en dicho espacio -Uno más- era siempre la oportunidad de avizorar más allá de lo presente e indicaba el sentido de supervivencia superior, que debían desplegar aquellos que osaban viajar en aquellas comarcas…

La soledad parecía abrazar a cada peregrino, no obstante el silbido del viento, el Eolo de los mensajes del lejano terruño de la isla parecía actualizarse en medio de la nada. Así , aún cuando la desesperanza podía visitarnos, algo muy profundo, parecía emerger de aquellas tierras para invitar a la exploración…

Los recuerdos de huellas milenarias parecían confirmar dicha sentencia, así como los vestigios de culturas memorables, que aunque extintas habían logrado transformar la simple piedra en arte y a la bestia en transporte, así como también al alto volcán en santuario y a la laguna en hogar de residencia para bellas doncellas encantadas…

Era aquél desierto algo enigmático, pues mientras avanzábamos por senderos devenidos en testimonio de la valentía de travesías antiquísimas, su fisonomía se tornaba en transfiguración; una suerte de mutación que lograba actualizar a la inerte tierra en verdadera potencialidad de vida, en valle, vergel y hogar. De esta forma fue que llegamos al antiguo oasis, donde se mantenían las formas de remotas ceremonias, en donde los visitantes exfoliados por al calor, el frío y la aridez retornaban a una suerte de segunda vida, una verdadera ventana en donde los tiempos marchaban al ritmo de los amos de aquél valle encarnados por personajes de solemne mutismo y gran vitalidad…

Simple ilusión, fantasía anhelada que descargaba una oleada de sensaciones sin mediar la intervención de artilugios, todo allí parecía revelación, explosión de multitudes albergadas en el interior y que ahora establecían una verdadera sincronía con el entorno delineado por las míticas labranzas de símbolos de proyección latente.....

Una suerte de pasadizo entre la vida y el más allá, entre paraíso y el averno incandescente, mera solemnidad de convenciones que no logra suspender la impresión de encontrar la belleza en su estado primigenio, ni asimismo ser mudo testigo de las voces que emanaban desde la profundidad para destacar que al menos en aquella tierra nada de lo traído era válido o mejor dicho las convenciones convertidas en leyes eran allí mera superficialidad, una simple manifestación de superficialidad y amaño de soberbia, que simplemente se desvanecían entremedio de las rocas, como las arenas rojizas que daban nombre a aquél solemne espacio como Valle de la Muerte…

Todo esto sin más oportunidad que ser testigo presente, actor privilegiado en medio de un escenario de vigorosa estética que aguardaba en cada instante sorprender y acompañar en un tránsito de verdadero desapego con aquello dado por cierto y certero..
Fue de esta manera que iniciamos una verdadera exploración que cual proyección transportaba nuestra sensación interna con los caminos que íbamos transitando, así como lo habían realizado esos “otros”, en viajes anteriores, éramos el eco, la actualización de un ritual que no lograba dar abasto para la búsqueda elemental, que mantenía la solemnidad de la travesía milenaria, con una verdadera fuerza invisible que trasladaba a ser conscientes de que el estar allí, no era simple acto de voluntad sino de sentido de encuentro y aceptación del espacio que nos recibía en ese momento verdaderamente mágico........

miércoles, 9 de noviembre de 2011

San Pedro de Atacama

Mágica expresión de nuestro norte, punto de encuentro de culturas milenarias que encontraron albergue en medio del desierto más árido del mundo.


Expresión de facetas diversas de una realidad que entraña los destinos de la vida en clave de expresión indescriptible, belleza trascendente y en donde el cielo parece hermanarse con los silentes parajes del desierto....

Los principales atractivos se encuentran en los alrededores del pueblo:


Iglesia de San Pedro: Perimetrada por un muro de adobe que tiene tres puertas coronadas por un arco, es la más grande y hermosa de la región. Fue sede parroquial antes de 1641, pero sus actuales muros datan de 1744 y fueron reparados entre 1839 y 1843. La torre, del año 1964, reemplazó una antigua de madera.
Museo Arqueológico R.P. Gustavo Le Paige: Su fundador, a quien debe el nombre, fue un misionero jesuita belga que realizó un dedicado estudio de la arqueología andina y recolectó cientos de objetos indígenas, los que con la ayuda de la Universidad Católica del Norte logra reunir en un museo. Con éstos restos arqueológicos se ilustra la evolución de los pueblos que habitaron el Territorio Atacameño en sus once mil años de desarrollo.
Casa Incaica: Es la construcción más antigua del pueblo, techada con vigas de troncos, ramas y paja.


Géiseres del Tatio: Emplazado en la cuenca geotérmica de igual nombre a 90 km al norte de San Pedro de Atacama a una altura aproximada de 4320 metros sobre el nivel del mar emergen imponentes fumarolas a través de las fisuras en la corteza terrestre originadas por el contacto de ríos subterráneos de agua helada con rocas calientes alcanzando unos 10 metros de altura y 85°C.
Valle de la Luna: Sitio localizado a 12 km del pueblo, por el antiguo camino a Calama. Es una depresión rodeada de dunas desérticas y cerros con impresionantes crestas filosas, que se encuentra sobre la Cordillera de la Sal. Forma parte de la Reserva Nacional Los Flamencos.
Termas de PuritamaTermas de Puritama]:,Termas ubicadas a 28 km de San Pedro de Atacama, están emplazadas al fondo de una quebrada a lo largo del río que corre a 33,5°c. Es un lugar ideal para el encuentro con la naturaleza y relajación. En lengua Kunza Puri quiere decir Agua y Tama caliente.
Pukará de Quitor, (Aldea de Quitor, Monumento Nacional): 4 km al norte, por el camino junto al río Grande. Es una fortaleza defensiva que data del siglo XII, aunque luego fue ocupada y reforzada por los incas.
Salar de Atacama: 62 km hacia el este. Es una reserva natural de flamencos, de gran tamaño. Este lugar tiene una vista magnifica, mostrando grandes montañas (en el invierno nevadas). Un lugar increíble para visitar y ser admirado por su gran belleza.




Creció la simiente en medio del desierto, construyendo la imaginación posible de anhelos significativos. De esta manera, se desplegaron en preciso enjambre desierto, salares, montañas, volcanes, animales variados y todo un indescriptible paisaje de enigma que dio inicio a San Pedro de Atacama.


Piedra que entraña labranzas milenarias, caminos de pioneros anónimos que se pierden en la memoria de un terreno de colores de misterio.



Tierra de rojo ardor, que parece deshacer la frontera de nuestra presencia ilusoria rodeada de una promesa de verde que de piedra se transmuta en pastizales, árboles y praderas por donde ebullen bestias y humanos en la hermandad del refugio prometido....



Volcanes imponentes son los guardianes custodios de lagunas encantadas, en donde se evocan tiempos desplazados más allá del presente, tiempo de encuentro que permite saborear el crucial desafío de la vida, sin más ambages que el signo de la heroicidad.


Cómo solemnes peregrinos que transitan en las caravanas de búsqueda permanente, tras la existencia de los corazones que laten en lo profundo de tus entrañas, allí mismo ante la mirada del Tatio, el viejo guardián desde donde observamos la respiración de nuestra tierra ancestral y primordial......









viernes, 28 de octubre de 2011

Probabilidades

En medio del silencio en que se encontraba absorto, pudo identificar el vuelo de imágenes que se sacudían en una especial simetría de traslado y junto con ello, oír los profundos ecos de voces que emanaban de la superficie.

La novedad era en que forma podía entender todo aquello, lo cierto es que nada era real o al menos así lo pensaba, aunque si recordaba bien las lecturas de los constructivistas radicales era válido preguntarse: ¿Qué diablos era la realidad?.
En fin, como fuera el estaba allí y veía aquello que nunca antes había experimentado y del mismo modo oía los mensajes de un componente críptico que no podía resolver…

En su profunda meditación, apenas era posible capturar nuevas sutilezas, sin embargo una frase brotó de aquella convención de hechos inexplicables a la vista del profano: ¿Escapar o encadenarse?, se quedó pensando, aquella pregunta y luego pudo responder con calma ante esa suerte de acertijo; ninguna de las dos, pues existen muchos caminos para llegar a nuestra meta, más allá de la posibilidad de evitación o del estancamiento….

Luego, las flores se acomodaron al son de la suave brisa, las aves alzaron su vuelo mientras la estepa se tornaba con un aire más amigable y la ruta de su propia vida parecía avivarse….

La nebulosa se tornaba así en apertura, posibilidad de camino y tránsito sin los agobios de enigmas encubiertos ni ideas que emergieran sin más, sólo la capacidad de ver más allá, de ampliar y significar apenas a un paso de lo ya visto, de lo experimentado y conocido…….

lunes, 24 de octubre de 2011

Revelaciones

Fue en el día señalado; aquél de conjugación de día y noche que la dualidad se compuso de imagen a través del número primario.
Desde aquél instante, que algunos llamaron simplemente inicio, se agitó la travesía que llevaría a los hombres de aquella comarca a enfrentarse entre bandos opuestos, como una manifestación presente de los antagonismos milenarios, opuestos que llevaban el signo de dialéctica, cambio que emanaba en un devenir constante…

El tiempo sólo acrecentó la división y cada cual extraía conclusiones a partir de los opuestos y aunque las propuestas eran significativas no lograban dar cabida a la idea primordial, aquella encriptada en la letra de unidad.
Algunos intentaron abarcar ideas de la realidad más allá de lo presente, otros tantos abandonaron sus bienes y los más se sumergieron en los disfrutes, cada cual labraba así su historia sin atender razones superiores.

La permanente irrupción de ideas no bastaba para dar alcance a las ansias de cada sujeto, lo que les envilecía en manera diversa, fue así que el hombre de la asamblea sentenció que: Nada nuevo había bajo el sol.
Pocos o casi nadie para ser honestos escucharon las declaraciones del anciano que dictaba lo que la experiencia le había transmitido, cual epifanía que surge en medio de la más excelsa mirada de búsqueda. De esta forma, la vida transcurrió bajo definiciones variadas y sentencias imprecisas que iban deshaciendo cada vez con más energía la unidad de los orígenes perdidos.

En medio de jornadas de búsqueda desesperada, los ancianos y sabios de la aldea definieron la respuesta ante el enigma instalado en forma tan particular como extravagante ante la mirada de los profanos pobladores. La respuesta vino del hombre extraviado, perdido, demente o sin razón según otros, que se encontraba en la periferia de la ciudad de torres iluminadas. De esta forma, fue que en el delirio de una de las noches, de aquél que todos habían olvidado en una pequeña choza aledaña a al gran río, las voces se manifestaron, estaban allí de manera nítida, nada evitaba su presencia en forma de mensaje extraviado, permanente y asimismo revelador. El sujeto que dormía interpelado por los códigos contenidos por siglos estaba a punto de ser el portavoz de la palabra sostenida por la brisa de esa madrugada privilegiada. De tal forma que en cada instante que los vaivenes de los árboles constataban la presencia misteriosa, las voces asimismo transmitían el anhelado contenido.

En medio de esta faena de sutiles aspectos, cayó nuevamente la noche en el poblado, la luna ascendió al cenit y la aurora declinó hacia la sima de los avernos, oscureciendo el sentido de los moradores, acallando la emergente alegría y con ello instalando la desesperanza como moradora de los corazones desprotegidos de aquella fe perdida. Por tal motivo, por más que el destinatario de la clave de aquella luminosidad perdida, cantara en alabanzas su secreto alcanzado, nada evitaba que las masas corrieran de lado a lado, gritando cual criaturas despojadas de protección, verdaderos niños perdidos en medio del mercado que lloran sin freno ni consuelo la partida de sus padres…

De este modo, el canto primigenio perdió la oportunidad de ser comunicado, pues la jugada de los astros había producido un eclipse en el día señalado, cerrando así la puerta a los que ya vivían en un eclipse interno sin posibilidad de cambio. Esto, al menos hasta una nueva oportunidad en que aquél olvidado pudiese nuevamente ser el mensajero del secreto de las voces milenarias….

jueves, 20 de octubre de 2011

Sirena Dorada

Fueron ochocientos metros de nado constante, verdadera travesía de titanes, con una suerte de construcción que daba en cada instante, paso a un camino de solidez. Una nadadora de excepción que demostró su calidad, tranquilidad y equilibrio junto a esa sonrisa de incomparable calidez que regaló a todos los que observamos su momento culmine en el podio de los triunfadores….

Pensaba en el largo camino para llegar no sólo a esa capacidad de potencial físico demostrado en la contienda acuática, sino en la actitud personal que evidenciaste tanto en el proceso del antes, durante y después de la prueba. Esa mirada de concentración, templanza y calma me evocaba a aquellos líderes que resplandecen con su humildad y calma, sin ambages ni ostentaciones.

Asimismo meditaba respecto a tu camino hacia el presente, imaginaba tu quehacer de sacrificios, esfuerzos, jornadas de planificación y competencia. Momentos de cansancio, frustración y asimismo la enorme energía de motivación que te llevaba a entrenar fuera del país hacia el camino elegido por ti. Consideraba asimismo en cuanta dedicación habías invertido y no pude dudar que tal impulso estaba sostenido por una familia que te apoyaba.

Como una verdadera heroína que debe atravesar por jornadas de prueba te imagine coronando un paso más en tu proceso de ascenso, pues asumo que sabes perfectamente cual es tu meta y desafíos futuros. Esa particularidad, te otorga un don especial y es la capacidad de que no obstante que vives el presente puedes soñar con materializar un futuro, esto mediante un programa, trabajo, motivación y esfuerzo, si mucho esfuerzo….

Gracias Kristel, ayer diste un ejemplo a muchos y muchas respecto a la búsqueda de sueños, pues con tu triunfo nos revelaste que nada puede surgir de la improvisación o del oportunismo y menos sin trabajo.

Eres mujer que avanza en medio del agua, como figura enigmática que mueve sus brazos en una danza de sentido trascendente, mucho más que deportista eres arquetipo de anhelos, esfuerzo y templanza. Peregrina de viajes presentes, pasados y futuros, en el instante de sueños coronados a través del quehacer labrado en jornadas de sol a sol y siempre bajo la consigna de deber más allá de simplezas, simple sortilegio de luz en medio de la tarde, eres mujer de bienaventuranzas"…..

viernes, 14 de octubre de 2011

LLuvia de Ayer

Lluvia extraviada, viajera de comarcas lejanas
Has llegado este día de fulgor y primavera
Tu mensaje ha corrido una larga posta
Esperada quizás por años, mientras la tierra se ha secado

Tus nubes preñadas de agua han llegado a la ciudad perdida
Sin más aviso que el trino de las aves
Tiempo de lavar esa faz desposeída
Tiempo de limpiar las huellas de los años
Los mismos que denotan la sequía de mi tierra

¿Porqué ahora?, se preguntan los sorprendidos ciudadanos
Mientras, corren a buscar sus ropajes de la pasada temporada
Lluvia de primavera, larga travesía
Tiempo ido que se actualiza en el presente
Visita de anhelos perdidos
Entre una sincronía de encuentros
Llanto, derrame y alegoría
Entre piedras y arenas yermas
Canto de esperanza y manifestación de imperioDe la naturaleza que no olvida a sus hijos

martes, 11 de octubre de 2011

El Devaneo de Pigmalión

En su agónico pesar, -El se interrogó-: ¿cómo unir esa entrañable distancia? Que hasta hace muy poco creía indivisible.

¿Acaso sería posible un puente entre dos mundos aparentemente disociados?, en medio de un vacío que asimilaba a la eternidad. No logró dar con la respuesta y sólo se quedó con la mirada fija hacia el inmenso ventanal.

Ella, en tanto guardaba un solemne silencio tras su derrota, aún desconocida a cabalidad por El. Su presencia asimilaba la evocación de una suerte de panteón sagrado, constituido por figuras sacras de divinidades cristalizadas en donde Ella resaltaba.

La noche dibujaba escenarios diversos, constelaciones que transitaban en medio de dos dimensiones que aunque paralelas en su trayectoria eran divergentes, al menos en el presente. Pues en efecto, las palabras eran tan factibles como una lluvia en pleno verano del Sahara.

La mirada extraviada hacia el exterior dio paso hacia el interior, cómo inicio de la senda de búsqueda, que entiende una causa de raíces mucho más cercanas a la redención personal que a la algarabía de las multitudes. Todo se encontraba dentro de sí, lejos de las convenciones y la perspectiva del ambiente social, quizás en otra esfera del tiempo que aún era indeterminada para sus propósitos. De esta forma, el tiempo presente dictaba una travesía de alto contenido introspectivo, con raudales de cuestionamientos, derrotas y éxitos ligados a si mismo y a esa dimensión del yo-tu que para ambos estaba poblada de una sombra que ninguno de los dos podía resolver. Así, como el enigma desafiante de la esfinge ante el tránsito de los viajeros o del mismísimo Minotauro en el laberíntico sendero de tramas por resolver tras la salida anhelada.

El espacio entre ambos universos no disminuía; el viento, la lluvia y la soledad sólo resaltaban la mirada perdida de cada cual, como una suerte de hechizo que los disponía a una prolongada expedición sin más certeza que la sofocante angustia de la oscuridad existencial.

De esta forma, las lágrimas de El, eran una suerte de barniz ante la imagen idolatrada, la efigie inalterada que permanecía distante y por ello se decidió a entregar lo mejor de sí para que aquella lejanía se tornara en algo que abarcara al menos su presente dejando el devenir, como esperanza, aunque fuese la apariencia de ilusión, de la mera probabilidad especulativa que alimenta la vana lucha de los mortales en sus horas de caída.

viernes, 7 de octubre de 2011

Mujer de Enigma

Es media tarde


El espacio se cubre de sombra


Mientras, el sol oculto mantiene la distancia


Tu silueta es incógnita


Pues sólo los murmullos te delatan


Caminas en medio de la nada


Tu rostro perdido junto al silencio




Figura de líneas pródigas


Ausente sin desearlo

Sólo transitas

Tu voz es lejanía

Extraviada, perdida en medio de la ruta

¿Que buscas?


Una mirada se asoma entre niebla

Una sonrisa apenas, sin más

Palabras débiles, en agonía

Cansancio que se arraiga en tu cuerpo

Observo tu faz de ausencia

Para encontar nuevamente tu sonrisa

Más nada parece evocar el despertar

Sólo pasado

Sólo recuerdos


En medio de la tarde

Con llovizna de indiferencia

Tu paso es enigma

Mujer de alas extensas

Mujer de sueños y fantasías










Mil Grullas

La novela del ilustre nobel de Literatura Yasunari Kawabata, embriaga de alegorías y manifestaciones de un ritual, que combina sutilmente la ceremonia del té como espacio de encuentro entre tiempos idos, presentes y futuros. Allí es donde el protagonista retorna a su hogar y junto con ello, al encuentro con personajes de la historia familiar y una misteriosa joven que logra admirar por apenas instantes y de la cual guarda el recuerdo de su pañuelo de mil grulllas.....



Mil Grullas (Sembazuru), presenta un conjunto de diálogos que a ratos se asimilan más a evocaciones, procesos internos, catarsis o encuentros con seres fantasmales, que al simple y llano encuentro Yo-Tu.


Así, los personajes se develan como incognita y asimismo con el despliege de potencialidad por descubrir que sólo cabe al protagonista, pues curiosamente es el, quién representa a un moderno Teseo que debe recorrer las líneas laberínticas en busca de la salida de su prueba suprema.


Para ello, interactuará con Ota la mujer amante de su padre y asimismo del propio protagonista Kikuji: " La señora Ota tenía al menos cuarenta y cinco años, unos veinte má que Kikuji, pero logró que él olvidara su edad cuando hicieron el amor. Kikuji sentía que tenía entre sus brazos a una mujer más joven que él mismo"......


Asimismo abordará una relación con Fumiko (hija de la señora Ota), lo que representará una suerte de cadena y continuidad con el Kharma familiar. La joven Fumiko, evasiva, aunque manifiestamente sumisa se encargará de adornar con los símbolos de la ceremonia del té su propia versión y comunicación. De este modo la ceremonia será la vía de comunicación de sus emociones, sus recuerdos y referencias de mayor relevancia estarán intimamente ligadas a este proceso.


En tanto, asomará la intrigante Chikako, profesora del ceremonial del té, amante por un breve tiempo del padre de Kikuji y asimismo una suerte de vínculo con aquellos aspectos ocultos de cada personaje. Lleva esta mujer una marca en su pecho constituida por una mancha, lo que otorga una suerte de señal y asimismo marcación de rechazo desde los hombres hacia ella.


Finalmente la inasible Yukiko Inamura, quién es más bien encarna a una aparición, proyección íntima y vínculo entre el mundo del protagonista y la realidad, pues su presencia pareciese desvanecerse en cada intento de acercamiento de este hacia ella.


Una novela que arroja señales de nuevos códigos de presentación de las relaciones en una trama donde los diálogos juegan un rol central más allá del término o fin de la narración.


- Ella lo miró-

-Es un Karatsu (porcelana Kyushu de origen coreano)

-Kikuji se acercó

-Es un tazón muy bueno-Ella lo colocó sobre la esterilla del piso.

Era un tazón Karatzu cilíndrico y pequeño, el cual, como Shino, podía ser utilizado todos los días.

- Es fuerte. Digno mucho mejor que el Shino.

-Pero, ¿se puede comparar un Shino con un Karatzu?.

-Uno puede si los ve juntos.

Atraído por el poder del Karatsu, Kikuji lo acercó a su rodilla y lo observó.

-¿Traigo el Shino entonces?

-Yo lo haré. - Fumiko se puso de pie.

Colocaron el Shino y el karatsu uno al lado del otro. Sus miradas se encontraron y volvieron a recaer en los tazones.

- De un hombre y de una mujer- Kikuji hablaba un tanto confundido-. Cuando uno los ve uno al lado del otro.

Fumiko asintió, como si fuera incapaz de hablar..........






miércoles, 5 de octubre de 2011

Cavilaciones

Un cambio estacional no se plasma sino en el proceso, pues no es un paso rígido, con avances y retrocesos, más siempre con fines que implican el camino de la transitoriedad. Los últimos días demuestran que del clima invernal no hemos saltado vertiginosamente a la estación primaveral, sino más bien ha ido cada peldaño en un ascenso de paulatino despliegue e inclusive con detenciones, retrocesos y luego la ineludible marcha.

Así en cada día encontramos la manifestación del nacimiento, ebullición interna de la energía latente que se expresa en brotes, trinos, algarabías y luminosidad muy propia de la época estacional.

Sorprende encontrarnos con esas manifestaciones tan sutiles e igualmente poderosas y más aún ajenas a la razón o control humano, en verdad es una verdadera revelación constatar que nuestro sobrepasado “dominio” no es sino una suerte de caricia o cosquilleo ante la potencia de la naturaleza. En efecto, pues no es necesario recordar hechos de catástrofes como las ocurridas el 27 de mayo del 2010 para “darnos cuenta” de la fuerza de la naturaleza, sino apreciar nuestra propia constitución, la de los seres que pueblan la tierra, el mar, sistema estelar y de galaxias, en fin lo sorprendente de aquello que a ratos parecemos obviar tras una simple pantalla nacida de la tecnología.

Digo esto bajo la premisa que durante bastante tiempo hemos sido absorbidos por los avances en diferentes áreas de las ciencias y que demuestran a un afanoso homo sapiens en plena actividad y de lo cual es interesante considerar cierto mérito en términos de invención y de sotisficación respecto a la técnica y tecnología. No obstante, esto a ratos nos nubla el horizonte, tornándonos vulnerables a la cualidad esencial de nuestra constitución de parte de un entorno que igualmente es vocero y actor.

En efecto, quién no siente una suerte de sensación de poderío al asentarse en construcciones faraónicas y con una alta excelencia en su acceso de tecnología. Imaginemos una vivienda o gran ciudad dotada de lo mejor de nuestro tiempo y obviamente encontraremos a una población con el sentido de existencia basado en una fortaleza relevante, más sin embargo vana, pues ya no depende de sus propias cualidades o capacidades sino de maquinarias que son el seguro de la supervivencia de los habitantes.

Una gran ciudad que sufre un corte de energía; ¿Adonde ir?, ¿Qué hacer?, o sin capacidad de telecomunicaciones ¿Cómo contactarnos?, ¿cómo llevar a cabo la mínima coordinación?, preguntas aparentemente odiosas más que entrañan la lógica preocupación, es decir la anticipación ante aquél evento que puede dejar de ser mera probabilidad y transformarse en un hecho.

En este sentido resulta curiosa la sensación de alarma que ha despertado la noticia de las supuestas “Profecías Mayas” o “El curso y efectos de un meteorito” hacia la tierra versus hechos con los que cotidianamente estamos ligados y vinculados como los mencionados previamente y con los que pareciéramos no sentir sino la sensación de dominio y control. Un apagón, es la expresión de un hecho cercano más que al parecer no causa alarma sino hasta su manifestación.

La sensación de seguridad sustentada en la tecnología de rato a rato se torna vulnerable ya sea por fenómenos naturales o falencias propias del sistema generado por los humanos, lo que constata una especial preocupación implícita de lo que en momentos elevamos en una suerte de deidad.

Como sea, estamos en una verdadera encrucijada respecto al rol que jugaremos en el devenir; simples extensiones de la gran maquinaria que hemos construido o más bien agentes de capacidad de vinculación hacia el entorno y de integración con este por sí más que mero intermediario.

En este sentido y retomando el inicio no debiésemos obviar cada evento del que somos testigos y que se encuentra ligado a esos cambios y transiciones de nuestro entorno natural y asimismo de nosotros, pues a través de la recuperación de dicha sensibilidad lograremos un contacto menos contaminado con nuestro espacio vital y asimismo con los distintos sistemas que lo integran. Como la transición estacional, la lluvia o el avance de la corriente hacia tránsitos marítimos que a su vez ligaran migraciones y cambios en el proceso de continua transitoriedad y ciclos.

lunes, 3 de octubre de 2011

Scout al Atardecer

Es media tarde, no obstante el sol aún ilumina con esa intensidad que caracteriza la transición estacional entre invierno y primavera.

Regresamos de un viaje familiar y al subir por la calle Carmen Fariña en la comuna de Vitacura, veo que caminan tres scouts, junto a su clásico tótem. Su paso es calmo y en su andar delinean una figura que destella una luminosidad especial, parecen alegres y envueltos en una amena plática, quizás preparando una misión determinada, comentando las actividades del día o simplemente definiendo los preparativos para un próximo campamento. Se ven ajenos a cualquier preocupación y su presencia no hace sino recordar mis días de Lobato, entre juegos grupales, camaradería, actividades grupales y el liderazgo como esencia de vitalidad y servicio.

Los observo por apenas un instante e inmediatamente despiertan recuerdos y emociones significativas, la actitud de siempre listo, los días de encuentros, preparativos de servicio y nuestras salidas al aire libre me evocan otra época, de un tiempo ido y que sin embargo se actualiza en estos jóvenes.

Al doblar observo a un grupo rezagado de ellos que están fuera de un local, es una cuadrilla completa, son adolescentes hombres y mujeres departiendo junto a la sonrisa, amistad y compañerismo, verdaderos valores de configuración de un equipo. Esa actitud tan propia de estas agrupaciones que impregnan significativamente las reglas de buena conducta y lealtad entre su filosofía de enseñanza.

Me interrogo y reflexiono respecto a las capacidades instaladas de los herederos de Baden-Powel que podrían ser una gran ayuda en el trabajo con niños y niñas a través de nuestro país. Una forma lúdica de enseñar, aprender y desarrollarse mediante la fraternidad, disciplina, esparcimiento y el trabajo en equipo.

¿Cuánto podrían aprovechar tantos jóvenes de esta experiencia de carácter mundial?

No obstante, la tarde avanza, al dejar atrás a los representantes de Baden-Powel, sólo quedan mis recuerdos de los líderes, el Akela de la manada que caminará hacia nuevos horizontes y la capacidad de tornar lo adverso en oportunidad y la caída en aprendizaje, pues en el viaje de un explorador siempre existirán aquellas contingencias e imprevistos que demandarán lo mejor de nosotros y del equipo.

viernes, 30 de septiembre de 2011

Salmo 23

Una pieza de hermosa prosa que trasciende la eventualidad para tornarse en un mensaje permanente de paz, tranquilidad y esperanza.

A continuación les dejo este Salmo revelador:

El Señor es mi pastor, nada me falta.
En prados de hierba fresca me hace reposar,
me conduce junto a fuentes tranquilas
y repara mis fuerzas.
Me guía por el camino justo,
haciendo honor a su Nombre.
Aunque pase por un valle tenebroso,
ningún mal temeré,
porque Tú estás conmigo.
Tu vara y tu cayado me dan seguridad.
Me preparas un banquete
en frente de mis enemigos,
perfumas con ungüento mi cabeza
y mi copa rebosa.
Tu amor y tu bondad me acompañan
todos los días de mi vida;
y habitaré en la casa del Señor
por años sin término

jueves, 29 de septiembre de 2011

Montaña



Porque tu voz es silencio
Inmensidad presente de enigmas
Con tus macizos que recorren
Los senderos milenarios
Fuerte columna que escala en los sueños
Tras la meta misteriosa y mágica
De inmortal sentido
Así te conocí cordillera
Recorriendo tus senderos
Desgastando con pisadas
El camino que otros
Antes recorrieron
Te conocí coronada de un níveo manto
Que irradiaba la presencia del astro rey
Aprecié tus habitantes
De natural grandeza
Quienes parecían entonar cánticos
De bienvenida ante mi visita
Río, tierra, viento y fuego
Puma, cóndor, araucarias, manantial oculto
Árida y soleada realidad
Fortaleza de tradiciones forjadas en el tiempo
Pasadizo de esperanza
Hacia la libertad trascendente
Viaje hacia confines incógnitos
Devenidos en presencia mágica
De paisajes delineados en sinfonía de cánticos y trinos
Junto al eco de voces extraviadas de quienes fueron
Tus huéspedes hasta ese ayer perdido.

martes, 27 de septiembre de 2011

Haiku




Vuelan las aves




Tan alto




Como su destino

viernes, 23 de septiembre de 2011

Dialogo de los Melios

Durante la denominada «paz de Nicias» (421-416 a.C.) que separa las dos fases más importantes de la Guerra del Peloponeso (431-404 a.C.), Atenas exige a la pequeña isla de Melos la renuncia a su neutralidad, la incorporación al número de sus aliados y el pago del tributo. En una dramática entrevista que Tucídides presenta bajo la forma de un diálogo, los representantes de Melos y los enviados atenienses exponen sin ambages sus respectivas posturas, unas posturas que representan claramente el contraste entre los argumentos razonados con los que los neutrales defienden su derecho a la libertad por un lado, y los intereses pragmáticos desde los que el más fuerte plantea sus exigencias.





Una frase dramáticamente realista inicia el diálogo y en ella se envuelve el concepto que subyace la relación entre naciones.



Atenienses: «(...) Se trata más bien de alcanzar lo posible de acuerdo con lo que unos y otros verdaderamente sentimos, porque vosotros habéis aprendido, igual que lo sabemos nosotros, que en las cuestiones humanas las razones de derecho intervienen cuando se parte de una igualdad de fuerzas, mientras que, en caso contrario, los más fuertes determinan lo posible y los débiles lo aceptan».


Melios: «Según nuestra manera de ver las cosas al menos lo útil (es necesario, en efecto, moverse en esos términos, puesto que vosotros habéis establecido que se hable de lo conveniente dejando aparte de este modo las razones de derecho), lo útil, decimos, exige que nosotros no acabemos con lo que es un bien común, sino que aquel que en cualquier ocasión se encuentre en peligro pueda contar con la asistencia de unos razonables derechos y obtenga provecho de ellos si con sus argumentos logra un cierto convencimiento de su auditorio, aunque sea dentro de unos límites estrictos. Y esto no es menos ventajoso para vosotros, tanto más cuanto que en vuestra caída constituiríais un ejemplo para los demás por la magnitud de las represalias».


Atenienses: «(...) Ahora lo que queremos demostraros es que estamos aquí para provecho de nuestro imperio y que os haremos unas propuestas con vistas a la salvación de vuestra ciudad, porque queremos dominaros sin problemas y conseguir que vuestra salvación sea de utilidad para ambas partes».


Melios: «¿Y cómo puede resultar útil para nosotros convertirnos en esclavos, del mismo modo que para vosotros lo es ejercer el dominio?».


Atenienses: «Porque vosotros, en vez de sufrir los males más terribles, seríais súbditos nuestros y nosotros, al no destruiros, saldríamos ganando».


Melios: «¿De modo que no aceptaríais que, permaneciendo neutrales, fuéramos amigos en lugar de enemigos, sin ser aliados de ninguno de los dos bandos?».


Atenienses: «No, porque vuestra enemistad no nos perjudica tanto como vuestra amistad, que para los pueblos que están bajo nuestro dominio sería una prueba manifiesta de debilidad, mientras que vuestro odio se interpretaría como una prueba de nuestra fuerza».


Melios: «¿Tal es la idea que vuestros súbditos se forman de lo razonable, que ponen en un mismo plano a los pueblos que no tienen ningún lazo con vosotros y a todos aquellos que en su mayoría son colonos vuestros y de los que algunos han sido reducidos tras una sublevación?».


Atenienses: «Es que piensan que ni a los unos ni a los otros les faltan razones de derecho; pero que unos se mantienen libres gracias a su fuerza y que nosotros no vamos contra ellos por miedo. Así que, amén de acrecentar nuestro imperio, por el hecho de ser conquistados nos proporcionaríais seguridad, especialmente en vista de que vosotros, siendo isleños, y más débiles que otros, no habríais logrado manteneros libres frente a los señores del mar».


Melios: «¿Y no apreciáis seguridad en aquello que os propusimos? (...) Vamos a ver, todos aquellos pueblos que actualmente no son aliados de ninguno de los dos bandos, ¿cómo no los convertiréis en enemigos cuando dirijan su mirada a lo que está pasando y se pongan a pensar que un día también marcharéis contra ellos? ¿Y con ese comportamiento, qué otra cosa haréis sino reforzar a vuestros enemigos actuales e incitar a convertirse en enemigos bien a su pesar a los que ni siquiera tenían intención de serlo?»


Atenienses: «No lo vemos así, puesto que no consideramos más peligrosos para nosotros a todos esos pueblos de cualquier parte del continente que, por la libertad de que gozan, se tomarán mucho tiempo antes de ponerse guardia contra nosotros, sino a los isleños que en cualquier parte no se someten a nuestro imperio, como es vuestro caso, y a los que ahora mismo ya están exasperados por el peso ineludible de este imperio. Esos son, en efecto, los que, dejándose arrastrar por la irracionalidad, podrían ponerse a sí mismos, y a nosotros con ellos, en un peligro manifiesto».


Melios: «Pues, si vosotros corréis un tan gran peligro para no ser desposeídos de vuestro imperio, y también lo afrontan aquellos que ya son esclavos a fin de liberarse, para nosotros que todavía somos libres sería ciertamente una gran vileza y cobardía no recurrir a cualquier medio antes que soportar la esclavitud».


Atenienses: «No, si deliberáis con prudencia; pues no es éste para vosotros un certamen de hombría en igualdad de condiciones, para evitar el deshonor; se trata más bien de una deliberación respecto a vuestra salvación, a fin de que no os resistáis a quienes son mucho más fuertes que vosotros» (...)


Melios: «También nosotros, ,sabedlo bien, consideramos difícil luchar contra vuestro poderío y contra la fortuna, si ésta no ha de repartirse por igual. No obstante, en lo tocante a la fortuna, confiamos en que no seremos peor tratados por la divinidad, pues somos hombres piadosos que nos enfrentamos a un enemigo injusto, y, en lo concierne a la inferioridad de nuestras fuerzas, contamos con que estará a nuestro lado la alianza de los lacedemonios, que se verá obligada a acudir en nuestra ayuda, si no por otra razón, a causa de la afinidad de raza y por el sentimiento del honor. En modo alguno es, pues, nuestra confianza tan irracional como afirmáis» (...)


Atenienses: «(...) Estamos observando que, a pesar de haber afirmado que íbais a deliberar sobre vuestra salvación, en todo este largo debate no habéis dado ni una sola razón con la que los hombres puedan contar para creer que van a salvarse; por el contrario, vuestros fuertes apoyos están en las esperanzas y en el futuro, y los recursos a vuestra disposición son muy escasos para que podáis sobrevivir frente a las fuerzas que ya están alineadas contra vosotros. Evidenciaréis, pues, la enorme irracionalidad de vuestra actitud, si, una vez que nos hayáis despedido, no tomáis una decisión que muestre una mayor sensatez que la de ahora. No vayáis a tomar la senda de aquel sentimiento del honor que, en situaciones de manifiesto peligro con el honor en juego, las más de las veces lleva a los hombres a la ruina. Porque a muchos que todavía preveían adónde iban a parar, el llamado sentido del honor, con la fuerza de su nombre seductor, les ha arrastrado consigo, de modo que, vencidos por esa palabra, han ido de hecho a precipitarse por voluntad propia en desgracias irremediables, y se han granjeado además un deshonor que, por ser consecuencia de la insensatez, es más vergonzoso que si fuera efecto de la suerte. De esto vosotros debéis guardaros si tomáis el buen camino. No consideréis indecoroso doblegaros ante la ciudad más poderosa cuando os hace la moderada propuesta de convertiros en aliados suyos, pagando el tributo pero conservando vuestras tierras, ni dejar de porfiar por tomar el peor partido cuando se os da la oportunidad de elegir entre la guerra y la seguridad. Porque aquellos que no ceden ante los iguales, que se comportan razonablemente con los más fuertes y que se muestran moderados con los más débiles son los que tienen mayores posibilidades de éxito. Reflexionad, pues, cuando nos hayamos retirado, y no dejéis de tener presente que estáis decidiendo sobre vuestra patria, y que de esta única decisión sobre esta única patria que tenéis, según sea acertada o no, dependerá que sea posible mantenerla en pie».Entonces los atenienses se retiraron del debate; y los melios, tras estar deliberando entre ellos, como su decisión estaba en consonancia con su postura anterior y en desacuerdo con los atenienses, respondieron lo siguiente: «Atenienses, ni nuestras opiniones son distintas a las que sosteníamos al principio, ni en un instante vamos a privar de su libertad a una ciudad que está habitada desde hace setecientos años, sino que, confiando en la fortuna otorgada por la divinidad que hasta ahora la ha mantenido a salvo y en la ayuda de los hombres, y en particular de los lacedemonios, intentaremos salvarla. Nuestra propuesta es ser amigos vuestros, sin enemistarnos con ninguno de los dos bloques, y que vosotros os retiréis de nuestra tierra después de concluir un tratado que resulte satisfactorio para ambas partes».



Esto es cuanto respondieron los melios; y los atenienses, dando ya por terminadas las negociaciones, hicieron la siguiente declaración: «Verdaderamente, a juzgar por estas decisiones, sois, a nuestro parecer, los únicos que tenéis por más cierto el futuro que los que estáis viendo y que, con los ojos del deseo, contempláis como si ya estuviera ocurriendo lo que todavía no se ve.


En fin, cuanto mayor sea la confianza con que os abandonéis a los lacedemonios, a la fortuna y a las esperanzas, tanto mayor será vuestra caída» (...)


Los atenienses mataron a todos los melios adultos que apresaron y redujeron a la esclavitud a niños y mujeres. Y ellos mismos, con el posterior envío de quinientos colonos, poblaron el lugar.

Entresueños

Siempre tras el camino, ya sea en tempestad, viento, lluvia o días soleados, con más o menos compañía. Pues, finalmente; ¿que más da?, cuando apuestas realmente a encontrar el sendero prometido, si buscas tu camino con afán...

La noche cae, el descampado se hace sentir, aullidos de bestias y el silbido del viento junto a la inevitable sensación de soledad sin soledad.

¿Cuántos días más seguirá esta expedición?, acaso como Aguirre, en su viaje de perdición y agonía o tal vez como el mismísimo Cortés. Descubridores, pero descubridores ¿de qué?, si finalmente llegaron a una tierra habitada por “otros”, que antes habían sido igualmente conquistadores.

La noche avanza y entre sucesivos intervalos de sueño y vigilia, mi conciencia se trastoca, siento que las voces perdidas, aquellas extraviadas por los que durmieron sin despertar se acercan en un canto de frenesí de mensajería. ¿Qué desearán comunicar?; acaso una bienaventuranza o simplemente un llamado al silencio.

Nada que recordar, nada que buscar en la conciencia, sólo el tránsito, la transición de ciclos, de cambios para no detenerse, la transitoriedad del misterio oriental, del hombre que dejó su riqueza para avanzar hacia el camino, en el Tao o la iluminación. Camino en mil vidas, prosigo mi curso, soy el que camina en senderos de soledad, de rato en rato los ruidos de poblados me atraen, comparto, discurro, participo y me integro, sin embargo en el fin de la jornada vuelvo a iniciar mi viaje.

Duermo, a ratos despierto, estoy ante el árbol en mi meditación, en otras me extravió en el bosque tras la bestia y en momentos me encuentro en un desierto de multitudes. ¿Quién entiende aquello?, desierto de masas, multitudes, seres ajenos que desfilan sin cesar ante mí.

La montaña está solitaria, apacible, realmente hermosa, su majestuosidad es solemne, altiva, sin titubeos, aquí la vida va siempre en juego sino anda a ver esos pobres congelados o esos otros desbarrancados en aquél risco. -Son las voces- ellas advierten y evidencian que la montaña no es hogar para dubitativos o débiles, más allá un par de cóndores vuela indiferente a mi cuestionamiento y pláticas con el viento.

El sol se pierde, la noche llega y los sonidos se mezclan en un concierto extraño, mientras el curso prosigue indescifrable para el profano que hurga en medio de cálculos y artilugios en una torre alejada.

El sueño continua, se envuelve, atrapa e invita a dejarse ir, sin más espacio de razón, me dejo conducir y la noche se vuelve amable hogar para el descanso. Es la conciliación, es descanso bien merecido luego de la ida y regreso por las conciencias en potencia que se trasladan sin cesar en medio de la oportunidad de expresión en los sueños. Como escenarios de exhibición o presentación de nuevas obras, las que se elaboran más allá de cualquier prioridad en el mundo de la otredad, de esa sensación que se actualiza y nos recuerda siempre desde la sorpresa o la perplejidad que no somos los controladores del mundo, ni siquiera en los mismos sueños que ofrendamos en cada estación de descanso.