Cae el sol en el atardecer, mientras vuelan las aves buscando refugio.
Una simple brisa calma la algarabía que hasta ayer guiaba los pasos de los peregrinos....
Es tiempo de volver a la tierra, es tiempo del sueño profundo, para despertar quizás donde o cuando
Las manos juveniles, se han tornado añosas, pliegue sobre pliegue, se anudan los pesares
Es tiempo de partir
El sol también cursa su ruta primigenia
Lejos en el océano ha de fundirse para renacer
De tal modo cada cual ha de cumplir su ciclo
De tal manera cada cual ha de trascender el tiempo
Nacer, vivir y morir, así fue escrito
Hace ya mucho tiempo
En líneas perdidas de textos mistéricos, cuya verdad esencial es inasible
Corre la tarde, el viento agita las estelas de mudanza entre el último calor
Afuera y adentro se calma la ansiedad
Es el respiro de la eternidad que se acrecienta
La interpelación del silencio, que abrió camino en el universo
Es el instante del hoy, que se traslada sin cesar
Para abrir un nuevo día, en medio del sueño que anhela ser nuevamente
Sin olvido ni otoño
Primavera de renacer bajo las capas de los siglos, hojas y polvo
Simple despertar, en medio de acordes de vitalidad y sonrisa
Juego de artilugios, maniobra de ilusión que se acrecienta
En el último respiro, del cuerpo que ya no es sino pasado
Te encerraste