Cursaron los días delante de la ciudadela, como aves de diverso designio
De tal manera, lo que se esperaba finalmente no llegó (la esquiva Paz)
Más no dejaron los ciudadanos de exigir insistentemente,
aquello que creían era su derecho.
Rompiendo las resistencias de la débil autoridad
De esa forma, se fue configurando enero y también febrero
Un verano atípico desde lo que recuerdo.
Junto con el devenir de la vida, algo más se añadió a la existencia
Una cuota de significativa rebeldía, cada día más sólida
Una fuerza subterránea emergente, que avanzaba a trazos zigzagueantes
abriéndose camino dentro de la rutinaria vida urbana.
Así las cosas, fue emergiendo un ritual de eventos que se incorporaron
Viernes de manifestaciones, cicletadas con advertencias, a veces amenazas a la disidencia, que comúnmente se ha denominado funa.
También enfrentamientos abiertos y quema de buses.
El fuego abrasador, siempre ha sido convocado en los sacrificios primigenios.
Los cánticos se escuchan en la calles, a ratos se desvanecen,
mientras el sol acalla la voz, surge la reunión, la costumbre tribal de parlamentar,
sobre hechos de presente, también de futuro.
Pequeños grupos reunidos en parques, bajo arboledas y en alguna que otra plaza,
buscan eludir la asfixiante temperatura, mientras elucubran el camino.
Los oráculos devenidos en encuestas, son el espejo de una realidad trizada y diversa, aunque
existe cierto denominador común: El bajo apoyo del regente, sus acólitos, y también de muchas otras instituciones.
El segundo mes asume un rol de mayor calma, aunque todo es aparente, siempre sutileza e ilusión entremezclada, con dosis de realidad.
No hay paz, no hay tranquilidad, vivimos hace bastante tiempo en una ola vertiginosa.
Se escuchan temores, rumores y presagios
Las voz del corifeo va guiando este extraño concierto
Chamanes perdidos, tecnócratas desafectos, ciudadanos huérfanos que hurgan en su interior tras la respuesta anhelada.
Fenómeno de tiempos inciertos, donde la amenaza se disfraza de mil caras
Mientras, el tiempo avanza, el aleteo de las aves se siente, la vista confirma la celeridad y calma.
Una sombra envuelve el cielo gris, es el pasar del tiempo que inquieta
No por mero recelo banal o superfluo
Sino por la certeza que Marzo se acerca; la fecha señalada -Según algunos-
Suena como campanadas de alerta, señal de lo inevitable
Una parte del libreto compartido secretamente por los integrantes de esta historia,
que al menos hace sospechar que nuestras vidas se tensionarán.
-¡ Dime tú, voz misteriosa adonde nos dirigimos!
¡Responde estatua perpleja!; ¿Cual es el designio que nos espera?
El silencio impera en ese diálogo e interpelación,
afuera las voces corren veloces tras los pasillos.
Como hormigas diminutas y laboriosas las manos de unos y otros trabajan
Sin saber a ciencia cierta el destino, cada agrupación va y viene
Quizás esa sea la mayor certeza que nos queda; -La vida sigue-
Lo que no sabemos, es cómo y en que circunstancia seguirá
Pues ya lo dijo el sabio de Efeso hace miles de años: "Nadie se baña, dos veces en el mismo río".....