Es curioso como el presente se entremezcla con sueños, recuerdos y realidad
Es curioso, -digo- porque es un hecho que sólo había ocurrido en ocasiones puntuales
Momentos determinantes, episodios de vida que marcaban a fuego
Un viaje, cambio de vida, inicio de estudios, enfermedad, nuevo trabajo, etc..
Un punto crítico o decisivo unifica todo lo que eres, lo que has sido y tus anhelos futuros
Hace ya un par de semanas, ese episodio se presentó, nuevamente envuelto en dimensiones alternadas y unidas de tiempo.
En esta ocasión fue todo muy vertiginoso, si bien el presente delineaba el camino, no era menor la presencia del pasado y el futuro.
Tampoco los sueños, percepciones y creencias estaban ajenas.
Era todo uno, unidad en una diversidad de partículas
Una suerte de microcosmos unificado en un centro que a su vez era un universo vasto
De tal forma, alegría, tristeza, satisfacción afecto y calma se encontraban
¿El centro de gravitación?, pues era mi yo, aunque difuso y con una mirada lejana
Más bien parecía una lejana evocación
Si bien era yo y esas dimensiones, también había algo más
En resumen, la enfermedad y muerte de un ser querido
Otro universo con el cual había tejido una relación, y que ahora vivía en otro mundo
La transformación que sufrimos no es menor
Tal como una cadena de átomos que se rompe,, de allí emana energía inconmensurable
Esa dinámica de liberación si bien puede ser imperceptible a los sentidos
No escapa de la definición del universo mismo, y de allí a mis propia existencia
De tal forma, en ese camino de transformación cada elemento debe buscar su ubicación
Lo sencillo o complejo no es un tema, sólo el tiempo
Pues dentro del tiempo nacemos y también nos extinguimos
Quizás la gran pregunta es como trascender el tiempo, más que su simple existencia
En ese camino inicié mi ruta
Desde el recuerdo material hasta las más secretas historias
Como una huella en la tierra o en la pared de alguna caverna
Hasta un libro leído, comentado o extraviado
También una sonrisa o el simple día que amanece con algún signo
No pretendo resolver las respuestas de todo
Más bien reconocer que la transformación de lo conocido hacia lo desconocido, es posible,
Existe y se constata diariamente
Y sin embargo, algo permanece
Ese algo es el nuevo centro de gravitación, con significaciones diversas
Que mantendrá mi relación con cualquier aspecto que haya partido
De tal forma, una hoja, una sonrisa de un niño o una oruga que trepa persistentemente por una rama, pueden ser una nueva forma de existencia..
Lo mismo un sueño a medianoche, la obra inconclusa o tus obras
Por tanto, el camino, no sólo demanda fortaleza, sino agudeza para reconocer el nuevo tiempo