jueves, 14 de abril de 2011
El Torreón
Cansado y abrumado de la masa de la ciudad, el joven estudiante buscó refugio en la montaña, hasta llegar a un torreón olvidado que ofrecía refugio y una mirada privilegiada. Desde allí podía observar la gran ciudad, diminuta masa configurada como un solo organismo que se movía ondulante a través de diversas señales transmitidas por cada uno de sus habitantes. Luego de meditar profusamente en aquella visión, llegó a la conclusión de la existencia del principio de : Unidad en la diversidad. Complacido al inicio, al poco tiempo aquella mirada única le fatigó, por ello comenzó a indagar entre los murallones y encontró pequeñas ranuras, grietas que facilitaban la vista desde un punto de vista distinto. Sorprendido, se dio a la tarea entusiastamente de recorrer cada espacio por diminuto que fuera y desde allí avizorar la imagen que traía a su retina. Descubrió de esta forma la :diversidad en la unidad. Con dicha enseñanza, un día cualquiera dejó la añosa fortaleza en busca de nuevas aventuras y conocimientos....
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