Autogoles, Chambonadas y otras Yerbas

Intento buscar un tema sobre el cual escribir, cuando de pronto vino a mi mente la denominación lanzada hace cierto tiempo por el Senador Alberto Espina, en relación a aquellos "errores no forzados" más conocidos como ; autogoles, realizados por personeros de su sector…

Al sondear los hechos, pude constatar que la especialidad de tales actos han sido los de carácter  verbal (aunque no los únicos), es decir frases, epítetos o simples desmadres lanzados con aspiración de reflexión de feria, que han terminado por hundir literalmente a los inspirados oradores, voceros y comentaristas.

La pregunta al respecto es  obvia; ¿Quién en sus cabales desearía marcar voluntariamente un gol en su propio arco?. Al menos, los hinchas, asistentes de ocasión, accionistas y todo ese enjambre de seguidores del fútbol saben bien que muy pocos por no decir nadie osaría “romperla” en su propia red. No obstante, ya sea por incontinencia verbal, un inconsciente algo travieso o simplemente las fuerzas del sino, los casos en el correr del último año han sido significativos y preocupantes pues demuestran una verdadera vocación para las “metidas de pata” en clave verbal por parte de los actores políticos y otros.

Algunos razonan en el sentido de la veta aislacionista, que por años primó en nuestra patria y que literalmente nos hiciera sentir como ajenos y distantes de cualquier contingencia o relevancia. Es decir ,nuestros actos a pocos o nadie le eran relevantes y por tanto teníamos en ello un aliado con vista gorda y manga ancha para decir lo que se nos antojara.

Otros se afianzan en el secretismo de camarilla en el que solían suceder, desarrollarse y solucionarse las cosas, que terminaban siempre con el típico barrido debajo de la alfombra.

En último escalón surge también la aproximación desde una demostración del despotismo patronal, la ostentación del caudillo o jerarca que se entiende superior, más allá de la ley, en el ejercicio del poder crudo, rústico que hace que el cacique literalmente arrolle o “ningunee” a la tropa, indios, rotos y ciudadanos de medio pelo a los que ve simplemente como comparsa para su ejercicio de mando y autoridad. Por ello, no debe extrañarnos este tipo de salidas de contexto en personeros ligados al ámbito político, eclesial o empresarial.

Algo ha ocurrido entonces que ha trizado los esquemas tradicionales trayendo con esto un aire de cierta libertad republicana a la hora de pasar la cuenta a las salidas de madre que antaño gozaban de las absoluta impunidad.

Antes de abordar los autogoles del presente, realizaré un breve periplo por algunos “lapsus” verbales devenidos en autogoles, que a esta altura poseen el valor de verdaderas reliquias históricas con autoría diversa, así por ejemplo encontramos: Los “Eventos” de Ximena Rincón, El “Jarrón” de Ricardo Lagos, “Un Pedacito de Tierra” de Patricio Aylwin o el “Pregúntenle a las Vacas” de Pedro García”.

Las anteriores, son algunas de la piezas heredadas de la era Concertacionista, que en su momento entregaron ingredientes suficientes para despertar el conflicto, ironía y malestar de la población. No obstante, los hechos transcurridos desde el inicio del actual gobierno autodenominado: “La nueva forma de gobernar”, se han tornado en un verdadero Karma en dicho sentido, pues hemos observado una y otra vez nuevas y creativas muestras de chambonadas bajo el ejercicio verbal de altisonantes autoridades.

A continuación, algunas de las más bulladas:

1) Mi sueldo es “Reguleque”: este chilenismo que define algo de mediana categoría, altura o consistencia, una suerte de entre Tongoy y los Vilos, fue la expresión utilizada por la Directora JUNJI para hablar de su sueldo (superior a tres millones de pesos) en un país con un sueldo mínimo cercano a los $180.000, no se necesitaba ser un gurú de la empatía para saber los efectos de dicha frase..

2) Se les acabó la Fiesta: Esta inocente frase que pretendía marcar firmeza terminó por sepultar al Ministro de Energía, quién pretendía cortarle el gas a los Magallánicos con un alza en los precios, iniciativa fuera de contexto y acompañada de comparaciones odiosas labró un destino idem. La frase trajo un levantamiento regional, movilizaciones, protestas, paros junto a misiones de paz, negociaciones y finalmente la salida del ministro y recientemente de la Intendente. ¿Un autogol?, por supuesto que sí.

3) El Puente Vale Callampa: Esta frase de oro y con destellos propios de un flaite, fue lanzada por el Ministro de de Defensa. ¿Motivo?, las preguntas e indagaciones sobre un puente mecano comprado por defensa a una empresa Estadounidense en desmedro de otra inglesa, esta reclamó y finalmente nos enteramos que los precios no eran los más convenientes para el erario del estado y que además excedían el valor de la oferta Inglesa. ¿Resultado?, el ministro renunció y también marcó un autogol del recuerdo.

4) Nos aprovechamos del terremoto para obtener beneficios: Esta expresión, surgida en medio de una reunión con pobladores causó un golpe directo al mentón al gobierno. En efecto quién las emitió era ni más ni menos que la joven Intendente de la octava Región, promesa política y con gran arrastre en la zona. Lamentablemente no contaba con ser grabada y que dicha grabación recorriera cielo, mar y tierra en cadenas, Internet y radio para ser repetida como un mantra. ¿Resultado?, renuncia luego de una extensa resistencia y forcejeos con la oposición y sus aliados.

5) Me recordarán como el Huevón que nos cagó: Frase llena de "elegancia" y vinculada al tracto digestivo. Fue pronunciada en un discurso con autoridades Municipales, por la máxima autoridad en salud hacia los gremios de dicho estamento, aludiendo a los descuentos por paros realizados. En este caso la situación aún no se resuelve y no sabemos el fin, no obstante nadie dudará en que cumple a cabalidad los requisitos de un autogol en un 100%......

Un equipo de futbol no es sólo bueno por tener una plantilla estelar o semi galáctica sino por saber jugar (vease diferencia entre un Real Madrid y Barcelona). En este caso los autogoles son demasiados y justifican el viejo adagio que señala ; "El Mapa nunca es el Terreno” o ese otro que nos sentencia “Otra cosa es con Guitarra”.

Aún es tiempo de revertir este pasmoso resultado con aroma a serie de Tres Chiflados, los cambios urgen, el entrenador no puede dilatar la salida de quienes sólo han jugado en la esfera virtual a ser administradores más nunca gobernantes.