Pues siempre llega el momento, de tal modo la estación da paso al verano y luego al otoño
Así, cada ciclo se consuma en un intermitente cambio.
Donde la rueda del Samsara gira sin detenerse
Ayer, hoy y mañana, inscritos en el río de la vida
De esta forma, debía volar el ave
Mientras, el proceso de migración maduraba en su interior
De tal forma debía parir la mujer el hijo que cargaba dentro de si
Morir el individuo, luego de la agonía
Despertar, luego del sueño
Callar el que medita
y gritar el que protesta
Nadie se baña dos veces en el mismo río
Aseveraba el sabio de Efeso
Del mismo modo, cursa el devenir
Dada la impermanencia que se desplaza por el cauce vital
Por ello, no lamentes, ni protestes
No maldigas ni te ensalzes
Tan sólo prosigue la ruta
Alza tu vuelo en el instante delineado
Pues, en cada esquina del camino, se abrirán nuevas avenidas
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