jueves, 9 de abril de 2020

Mi planta

Suceden cosas extrañas en nuestras vidas
Yo sé que algunos las niegan,
incluso las ridiculizan
A mí no me ha raptado un ovni, ni tampoco una chica sueca
Sin embargo, tengo algo que decir
Quizás más mundano, tan mundano que ya es invisible
Eso nos sucede, sí lo entiendo

El hecho es que desde la ventana de mi trabajo
Cuelga un macetero hace tiempo
Yo lo riego, para no dejar que esa tierra se reseque, y
repita lo que veo a diario
Una tierra árida por doquier
Cerros desérticos, campos baldíos y veredas amarillas
Lo riego y converso, lanzo mis parabienes

Ocurrió entonces, que de ese ir y venir, surgió una planta
Pequeña, mínima, pero que se  asomó a este mundo
Como cada uno de nosotros alguna vez
Día a día se fue alzando y se irguió con prestancia
Hasta adquirir una personalidad propia, asimismo
se fue envolviendo entre la reja protectora
para escalar más arriba de mi piso.

No pasó mucho, y su presencia inquietó a algunos residentes
Vinieron a verme, y luego se marcharon
Pero no hubo mayor complicación
Mientras, seguía creciendo, yo más le conversaba
Le hablaba de antes que llegara
De su ausencia y presencia
También le preguntaba desde donde había llegado

Eran diálogos curiosos, ya sé, muchos creerán que estoy algo loco,
Al menos excéntrico
Sin embargo, sentía su respuesta y compañía
Casi como un susurro
Una dulce melodía perdida que me hizo conectarme con épocas pasadas
Con un tiempo sin relación y un espacio sin límites
Donde el mundo se abría ante mis ojos
Desde una simple espora que anidó en el mismo macetero,
que yo había regado y acompañado en tantas jornadas
Para abrir un universo desconocido, el universo del origen y de los hechos
Más allá de causas y casualidades, sino del misterio
Ese que nos habita al igual que este planta
en nuestro propio ser
Donde colgamos como maceteros, en este mundo










No hay comentarios: