jueves, 30 de junio de 2011

Upanishads




"Camino, en medio de la noche, luego a tientas palpo lo esencial, pues no son mis manos, ni los pies, ni los ojos los que me guían. Es simplemente el camino interno, el que emana, el que surge, aquél cultivado en largas jornadas, bajo un árbol, en un día nublado, en la tristeza y la alegría, simplemente en el camino de la vida"






Los Upanishads son supremas visiones espirituales expresadas verbalmente entre los siglos ocho y cuarto antes de Jesucristo. A los primeros Upanishads se agregaron otros que se fueron componiendo hasta el siglo quince de nuestra era, ampliando o explicando las visiones primeras eternas; y su número aumentó hasta el punto que se han podido imprimir en sánscrito hasta ciento doce Upanishads. La colección completa casi iguala a la de los textos de la Biblia. Los dos Upanishads más extensos son el Chandogya y el
Brihadarangaka, de unas cien páginas cada uno. Son tal vez los más antiguos. El más breve es el Isa Upanishad que sólo tiene dieciocho versículos y ocupa unas dos páginas de este libro. No es uno de los más antiguos, tal vez del tiempo del BHAGAVAD GITA unos cuatrocientos años antes de Jesucristo, pero debido a su cósmica grandeza suele encabezar las colecciones de Upanishads en sánscrito en la India. En este libro hay traducciones Completas de siete Upanishads, del Isa al Svetasvatara; y de los otros hay selecciones, escogidas por su elevación poética o espiritual. La palabra Upanishad se relaciona con la raíz sánscrita SAD, estar sentado. En el Sermon de la Montaña podemos imaginar a los discípulos sentados a los pies del Maestro escuchando el sublime Upanishad. El espíritu de los Upanishads lo encontramos en las Palabras del Evangelio “El reino de Dios es en vosotros”; y en los versos de San Juan de la Cruz cuando el alma, en una noche oscura:
Sin otra luz y guía,
Sino la que en el corazón ardía,
va a unirse con su Dios.

Anteriores a los primeros Upanishads tenemos en la India la creación de los Vedas, visiones poéticas y espirituales en las que la imaginación humana ve primero a los dioses y los expresa en creación poética, y después va avanzando hacia unidades más intensamente poéticas y espirituales hasta llegar al Brahmán único de los Upanishads, unidad suprema como la del Dios uno de Moisés, del Cristianismo y de la religión islámica. Así como San Francisco de Asís se dirige en canto sublime al Dios de la naturaleza y habla del “hermano sol, hermano viento, hermana agua y hermano fuego” los ve todos expresando la gloria de un Dios del universo, y por tanto, Dios del sol del viento, del agua y del fuego, en los Vedas hay la visión de un dios del sol, un dios del viento, un dios del agua y un dios del fuego, y la gloriosa poesía de estos y otros dioses. En los Upanishads la visión espiritual y poética va desde una diversidad hacia una unidad, y de los dioses a Brahmán, el Dios de todos los dioses, suprema unidad del Universo que reúne y supera su inmensa variedad.

Los creadores de los Upanishads fueron pensadores y poetas; y el poeta bien sabe que si la poesía nos aleja de lo que se llama realidad es sólo para elevarnos hacia una Realidad más alta donde, lejos de las limitaciones de un estar, encontramos la infinita alegría de un Ser.

Estas creaciones están tan por encima de la curiosidad arqueológica de algunos eruditos como lo está la luz del sol por encima de sus definiciones. Necesitamos de la erudición para
ir a buscar los frutos de sabiduría de los tiempos antiguos; pero es sólo una elevación espiritual que nos permite gozar de esos frutos y transformarlos en vida.

El Brahmán del universo, el Dios trascendente de tiempo y de espacio, pero inmanente en el tiempo y en el espacio es, según los Upanishads, el mismo Ser nuestro y el Ser de todas las cosas. El Brahmán trascendente cuando es inmanente en nosotros se llama Atman. Son dos nombres para un mismo Ser: el Infinito se llama Brahmán, y el Infinito manifestado en lo finito y limitado se llama entonces Atman. En su eterna clarividencia los maestros supremos vieron un Infinito de unidad trascendente y al mismo tiempo un Infinito de variedad inmanente. Es el Dios expresado como el “Todo en el todo” de poetas, místicos y videntes, y después explicado, y a veces complicado, en teologías que son a la experiencia de algo eterno, lo que la gramática es a la poesía: un estudio y análisis intelectual, y no experiencia vital, Realidad de vida, una abstracción de pensamiento como son los números, ideas indispensables para cálculos, pero no cosas que podamos tocar con las manos exteriormente, aunque mucho menos impalpables ilusiones. Como nos dice y sugiere el
Kena Upanishad, Brahmán o Atman, no es algo que se pueda ver, oír, gustar o tocar con los sentidos, no es algo que se pueda comprender, imaginar, o concebir con el pensamiento. Está más allá, de los sentidos y de todo pensamiento. Es un Amor hacia un más allá. Un Amor a quien se va por el camino del amor, y cuanto más puro y más intenso es el amor tanto más se ve y comprende y se siente y se vive el Amor infinito que es la causa de nuestro finito amor. Brahmán no se puede pensar con la mente; es: “Aquello que hace
posible que la mente pueda pensar”.

Uno de los mensajes de los Upanishads, explicado después en el Bhagavad Gita, es que sólo amando se comprende el amor, y no mediante explicaciones o definiciones: amar y saber son, al principio, divergentes, como los lados de un ángulo; pero a medida que se va subiendo por los dos lados, el saber comprende más al amor hasta que al fin son uno. El amor puro transforma el estar en un ser, y en tal sublime transformación, algo finito y temporal se ha convertido en algo infinito y eterno, lo mortal se ha convertido en algo inmortal. Es como el salir a la luz de dentro una cueva oscura, un despertar después de
dormir, un momento de Eternidad y alegría suprema por encima de la ilusión de placeres que Pasan y dolores que Perduran, un ser consciente más allá de un estar inconsciente, un momento de vida tan intensa, tan absoluta, que permite una fe basada en experiencia, y no una creencia procedente de palabras y libros, si bien libros y palabras pueden ayudar al alma inflamada de anhelos; finalmente un momento de vida que permite a un San Juan de
la Cruz decir:
Que bien sé yo la fuente que mana y corre,
Aunque es de noche.

En el saber estudiamos la variedad de las cosas, las definimos y comprendemos, y así las dominamos: es la ciencia. Pero en el amor puro contemplamos las cosas sin deseo de posesión, sólo por el gozo de la contemplación: es la poesía. En el saber nos separamos de las cosas, hay un nuestro yo que estudia y la cosa estudiada; pero en el amor nos unimos
con las cosas y en la alegría de la contemplación desaparece el sentido de posesión, de egoísmo y de destrucción. Un grandioso árbol milenario puede ser objeto de contemplación en silencio para el poeta, de estudio y gran actividad cerebral para el científico, un objeto de mero lucro para un comerciante que, sin consideración a la grandeza sublime del árbol milenario, está dispuesto a comprarlo, venderlo, y hasta quemarlo. ¡Cuando pensamos y analizamos, vemos las cosas en su variedad; pero cuando amamos, las vemos en su unidad.


El saber amplía la vida tanto hacia el bien como hacia el mal, pero el amor puro la eleva siempre hacia el bien. Por eso es que el Katha Upanishad dice: “Quien ve la variedad y no la unidad muere una y otra vez”.

martes, 28 de junio de 2011

Elella




-Ella-, camina lentamente entre los muebles hasta confrontar el ventanal empañado por la niebla que envuelve el entorno, su mano limpia el vidrio para contemplar la ciudad iluminada. La noche ha caído sin aviso previo, de manera contundente, así se imagina el momento que ella misma vive, como un recordatorio, una suerte de notificación que no puede olvidar….
La lejanía de esa urbe que se dibuja a destellos, le acongoja, su cara muestra la señal de su desafección, una suerte de inflexión entre ese pasado reciente y su acontecer actual que no logra desatarse. De esta forma, sin resolución nada parece tener sentido, su camino perdido, extraviado y malogrado la tienen en medio del silencio, sin nada que comentar..

-El- en tanto la observa, en silencio, incapaz de elaborar un discurso o una frase que al menos lo contacte superficialmente con ella, así unidos en un espacio físico pareciese que se encontraran en dos mundos distintos, sólo su mirada, sólo su contemplación, nada más. El silencio cala hondo, su pesar es una carga difícil de obviar;- vacío existencial-, solemne plataforma en donde vagan las intenciones sin concreción, el mero anhelo, la sóla idea sin consumación. Como ese presente ambiguo, tan escindido como el amor que se habían jurado, como esa promesa realizada en los días de estudios y que ahora eran recuerdos destilados en una ausencia….

Mientras, -ella- sigue allí con su mirada marcada, el frío de la noche no logra ahuyentarla de su vigilia, pareciese decidida a escudriñar hasta los últimos confines de esa realidad en que estaba sumergida, allí en medio de su casa, cuando en verdad esperaba que fuese otra la vivencia. En cualquier lugar, menos en su hogar - había señalado- , pues habiendo apostado a su amor furtivo nada le importaba. Más, por respuesta en la hora decisiva había recibido un desafuero y el abandono de su amante, quien ahora caminaba en una senda distinta, lejana y distante, tan distante como su pensamiento, mientras apenas a metros era observaba por su marido…..

Pensaba en su pesar, en su soledad, en el exilio que había recibido, nada más, simplemente ella era principio y fin, pues eso mismo fue lo que la llevó a iniciar su aventura, el deseo de ser simplemente ella centro y principio de todo, sin mediar excusas familiares, de hijos o su cónyuge.


No obstante ahora estaba de regreso, mientras la madrugada se pronunciaba inclemente, ajena a su mundo, pues después de todo ¿Qué tenía que decir esa noche invernal?; -nada-, pues su silencio había sellado el destino de su propia vivencia, al menos en ese instante…….

viernes, 24 de junio de 2011

Fuego Bestial

Fuego lacerante
Te has enseñoreado de mi comarca
Tú acerbo quema mis entrañas, desde la impía palabra enunciada
Dolor; tu hueste mortífera acribilla la corporalidad
Sin descanso, sin meditación,
La noche se extiende, lejos de la calma
Lejos de mi conciencia
Pues el consumo de energía, se esfuma en medio del azufre
Cuerpos deambulan; son filas de itinerantes que caminan a rumbo perdido
La misma esquina, el mismo lugar
Donde el acecho de la maquinaria levantó la columna
Desde el mismísimo cielo
Aquél que prometía salvación
Ha tornado nuestro espacio en el averno
Turbación, extravío y maldiciones
Son los cantares que acompañan a la multitud
La vieja calle destruida, la muralla corroída, las ventanas sin visión
Entre escombros; cuerpos inertes
Transfiguración de vida a muerte
Severo incendio que consume
Destello fulminante que sentencia la condena; que se eleva entre clamores y desgarros
Asfixiante padecer que carcome ahora y por años nuestra esencia
Mientras el pesar de los pequeños se desploma en su mirada



¿A quién le importan esos cuerpos?


Apenas un instante, una sensación
Mañana será otro día, mañana será otra voz
La de aquellos acerados que hirieron mortalmente
Los vencedores del fuego, del plomo, de la maquinaria
Quienes descendieron con sus parabienes en medio de la tormenta

jueves, 23 de junio de 2011

Pinguino Viajero




Sorpresa a lo menos debe haber experimentado la residente de la playa Peka Peka en Nueva Zelanda, cuando en un paseo por la costa sorprendió a un residente foráneo. En efecto, ante sus ojos y los de su perro, se encontraba ni más ni menos que un Pinguino Emperador, residente del Continente Antártico.



Un joven ejemplar del mayor exponente de su especie, que con cerca de un metro observaba algo desconcertado a su alrededor un ambiente radicalmente distinto al que había dejado atrás...




Un total de 3.200 Kilómetros recorrió este aventurero para llegar a las costas de Nueva Zelanda, una travesía de largo aliento, que sin embargo lo mantenían en excelente condición de peso y ánimo, según los evaluadores que concurrieron a dicho lugar...



¿Qué Buscaba?, ¿Adonde pretendía llegar?, son algunas preguntas de su enigmático recorrido, lejos de los hielos árticos, focas leopardo, ballenas azules y por cierto de orcas que hasta hace poco le eran familiares hoy en tanto todo ello ha sido transmutado.....



Las autoridades han asumido que así como llegó, de igual modo el debe evaluar adonde seguirá sus pasos, descartando un traslado a su entorno para evitar posible contagio con enfermedades que pudiese haber adquirido en su viaje.



Mientras, el se adapta y aprende a reconocer que la arena no es nieve, pues comió abundante arena en su comienzo, como todo cambio, la capacidad de asimilarse al ambiente y obtener beneficios de este será un gran desafío.



Amigo aventurero, eres Ulises tras Itaca o tal vez un Marco Polo tras Catay, signo de traslado y migración primaria. Cómo tus parientes las aves voladoras, decidiste agitar las tuyas en ese extenso mar para iniciar la travesía milenaria, la misma que hicieron Maoríes desde la lejana Polinesia, la misma que nos lleva a nosotros a transitar en el mundo, de ciudad en ciudad tras nuevos rumbos en esta vida.



Espero que tu camino llege a buen destino-sólo tu sabes adonde te dirigías- pues dentro de tí se alberga ese continente aún virgen que al igual que tú, ha iniciado un viaje de peregrinación hacia destino incierto.....








lunes, 20 de junio de 2011

Momento



Tarde de otoño,
Las bandadas vuelan
Rumbo norte

Rumbo al Día del Padre

Llueve en Santiago, las calles lavan su rostro del tiznado que alberga la superficie de esta ciudad, hasta ayer gris y hoy traslúcida como un rostro que rejuvenece al sacar capas y capas de sedimento, provocado por partículas contaminantes de origen diverso.

El silencio asimismo se extiende, para el deleite de quienes no olvidamos el viento, las gotas que precipitan y las aves que en su peregrinación labran un escenario de remembranza anclada a ese tiempo ido, que hasta ayer era presente vital…

El vidrio se empaña, viajo a ver a mi padre, leo mientras mi bus avanza en un tránsito moderado, calmo -diría yo- por la carretera, rumbo a mi hogar primigenio. Atrás queda la ciudad de cemento y sus demenciales moradores que la elevan a salvaguarda de nuestro destino.

La lluvia a ratos se torna furiosa, la arremetida es significativa y desde un pequeño fragmento de la ventana, observo como la tierra se presenta ante un ritual milenario. Me siento extraño, si bien no ajeno del todo, algo inquietante me acompaña, pues he vivido esa sensación otras veces, -lo sé instintivamente- y en cuanto me siento de regreso, fijo mi atención en el periódico que he comprado. La lectura es amena; entrevista del juguetón y psicomágico Alejandro Jodorowsky (a través de una pauta enviada) al ácido y destacado poeta Armando Uribe. Las preguntas buscan incomodar o al menos invitar a ser “políticamente correcto”, Uribe replica y ordena el enjambre de ardides del psicomago una y otra vez, con esa característica formalidad suya que detiene en seco hasta el más osado interlocutor. –Pienso y asumo que me agrada Uribe-, nada que ver con esos saltimbanquis actuales, que con sonrisas o de manera rastrera pretenden comulgar con Dios y el Diablo o asumir un rol de ambos sin salir magullados. Prosigo mi lectura, unas páginas más allá ojeo las opiniones de Zurita, quién remacha: “Ya hice lo que tenía que hacer”, al parecer existe un encuentro de notas con poetas esta mañana.

El viaje es breve, el camino conocido, así el tiempo parece disminuir entre tanta ansiedad, pululando en medio del devenir que nos espera en medio de la nada. Fijo mi lectura en medio de una nota referente a jóvenes con enfermedad de viejos. Pienso:

- Lástima de aquellos que pretendieron culminar su vida en un solo acto, cuando nadie es dueño del libreto-.


La mañana avanza, ni rastros de las cenizas del volcán caulle por estos lados, al contrario las montañas se tornan cada vez más nítidas y con esa clásica nube que las envuelve en medio de una nevazón. Imponentes moles, son los gigantes dormidos a los que aludía Serrano en sus escritos, solamente dormidos pues como hemos constatado en los últimos días la fuerza telúrica corre ávidamente en las entrañas de nuestra amada tierra.

Me acerco a mi objetivo, el valle se despliega en su magnificencia,- ¡Aconcagua por fin!- exclamo, tierra de sacralidad, campesinado, viñedos y olor a trillas junto a sus cordones montañosos que adornan el extenso valle que se va enlazando en medio de riscos, montes y ríos.

La celebración del día del padre resulta una excelente excusa de reunión familiar, la lluvia no se detiene, las gotas rebotan en el pavimento mientras en un potrero el verdor de antaño me recuerda los días de mi infancia.

Al bajarme el aire es otro, la tierra bulle de vapor, mientras camino donde mi progenitor, logro por un instante apreciar esa magnífica escena y el abrazo con mi padre es más fuerte de lo esperado, como si hubiesen pasado siglos y fuéramos más pesados, rígidos, aquellos que ahora cumplíamos el ritual de saludo y encuentro….

viernes, 17 de junio de 2011

Paranoia




La paranoia es un término psiquiátrico que describe un estado de salud mental caracterizado por la presencia de delirios autorreferentes.


Sensación de vulnerabilidad o simple ideación que puede convertirse en parte de la vivencia con signos de delirio que acompañan nuestra existencia.


Expresión nacida de emociones contradictorias, vulnerabilidad extrema y asimismo en la pérdida gradual de nuestra potencialidad por guiar nuestro destino.

Ambientes hostiles, controladores y castigadores pueden ser causales de esta expresión que deriva en esa sensación de ser vigilada por un “ser o entidad” omnipresente. Así por ejemplo, ha sido observada como síntoma postraumático luego de vivencias en sociedades totalitarias y sectas, también su presencia surge en ámbitos laborales competitivos o con estructuras de secretismo.

Ligada a etapas de evolución ancestrales en donde la vida se jugaba a cada instante y en donde cualquier espacio podía albergar a nuestro enemigo, el dispositivo de alerta, sospecha e identificación del riesgo resultaba vital, sin embargo con el paso del tiempo la sobredimensión de esta particularidad ha llegado a manifestaciones que terminan por consumir nuestro juicio de realidad hasta la psicosis.


Así, el sentirse observado/a, seguido, escuchado y aún más espiado por fuerzas extrañas o personajes enigmáticos forma parte de esta estructura y presenta una evolución que resulta inquietante, trastocando nuestra realidad en el inicio hasta que esta misma llega finalmente a asumirse como parte de vivencia. Es en ese momento, en donde la expresión asume su mayor vitalidad, pues una cosa es la mera sospecha, suspicacia o ilusión respecto de un “algo” que podría intervenir en mi vida y otra muy distinta es entrar en el mundo del delirio en donde el acecho, el ser observado o donde fuerzas malignas actúan "concretamente" sobre nosotros y son parte de nuestra propia evolución o desarrollo, desde nuestro juicio..

En este sentido, tanto el afán de pretender mantener el control o capacidad de alerta de manera permanente, como la percercepción de si mismo -como vulnerable- nos pueden conducir a un mismo destino, cual es ; otorgar un escenario de alta indefensión respecto de nosotros, lo que sumado una autopercepción generada a través de mecanismos explicativos parciales nos lleven a terminar por entender hechos casuales o fortuitos, como parte de una intrincada trama de conspiración hacia nuestra persona.

Es este escenario que la paranoia se acrecienta, acompañada de alucinaciones, delirios y otras manifestaciones sintomáticas llegando a expresiones de alto compromiso consigo mismo y el entorno.


El significado del término ha cambiado con el tiempo, y por lo tanto diferentes psiquiatras pueden entender por él diferentes estados. El diagnóstico moderno más adecuado para la paranoia es el de trastorno delirante.

martes, 14 de junio de 2011

Ciclistas al Desnudo

En algún momento con el impulso de la técnica y evolución social se dieron los pasos para alejarnos de la edad de la inocencia que ha sido simbolizada habitualmente como esa desnudez en donde no había espacio para el pudor, pecado o maldad alguna, sino un compartir más que cara a cara, en una relación- de cuerpo a cuerpo-, quizás como signo de transparencia, integración y comunidad indiferenciada ......


Posteriormente, los artificios creados por el hombre fueron paulatinamente cubriendo nuestra "inocencia" hasta sumergirnos literalmente en una coraza, no sólo externa sino interna. De esta forma y totalmente cubiertos, blindados y a la defensiva, salimos expelidos a relacionarnos con esos "otros", que antaño formaban parte de nuestra comunidad en una relación de antagonismo, desconfianza y hostilidad....


De esta forma del trato amable y cercano asumimos que cada día representa una batalla campal , la que ha superado con creces los espacios del Dios Marte, para desbordar cada metro de nuestro entorno; tanto en carreteras, hogares, escuelas , negocios, calles y vías varias, sin tregua ni paz posible....


En medio de esta suerte de desborde incontrolable, un grupo de ciclistas ha retornado a los tiempos primigenios (tan sólo por escasas horas) y han desfilado junto a sus bicicletas en una marcha que les permita resaltar no sólo sus derechos sino su deber de vivir junto a los demás ciudadanos en un contexto de respeto. La forma de la marcha ha sido lo particular, pues para esta iniciativa se han despojado de sus vestimentas y con ello también han simbolizado su vulnerabilidad y asimismo el hecho radical de que su corporeidad es en si mismo su único blindaje, lo que los pone en evidente desmedro frente a las maquinarias mecanicas que transitan en las calles y vías urbanas....


Por otra parte, este acto ha sido oportunidad de expresar un estado de "empelotamiento" en buena onda ; sin violencia, saqueos, destrozos o devastación, tan propio de otros exponentes ciudadanos..

Por ello, deseo destacar este ejercicio cívico y ciudadano para un grupo que tradicionalmente ha sido ejemplo de defensa y práctica de un estilo de vida más humano, natural y saludable......

Mis saludos sinceros para "los y las" Ciclistas del sábado 11/06/2011....

jueves, 9 de junio de 2011

Y Tu voz



Y tu voz, ¿adonde ha ido?, apenas un susurro
Apenas un fragmento
Perdido, extraviado sin más
¿Qué sucede entonces?, cuando la voz calla
Está y no está, a la vez
Cuando el decir no es más que una simple mueca
Que brota de músculos estériles
Incapaces de decir siquiera palabras primordiales
Figura ajena, lejana que se acerca en medio de la niebla
Con pasos sigilosos, mientras el silencio cava su morada
En lo más extremo de la vida, en el principio de todo
Como germen de exterminio, sin sentido, sin mañana

¿Adonde has ido?, tus pasos no dejan huella
Lejos, quizás muy lejos, donde no pueda seguirte, ni menos encontrarte
En algún destino secreto, en una madriguera, en una isla

¿Quién lo sabe?, acaso el ave que circunda los cielos
El viento que arrulla los cabellos, tus cabellos
O tal vez el reflejo de tu imagen, en la fuente universal
Por el momento sólo silencio, mutismo que mata
Mientras yo espectador constato que tu voz susurra
Notas indescifrables ante mi presencia

miércoles, 8 de junio de 2011

Ecologismo Part Time




Carta


Sres(as)


Ciudadanos




A través de la presente misiva deseo realizar un sincero cuestionamiento respecto de la realidad de esta vertiente y sus efectos prácticos en una ciudad como Santiago y nuestro país.

¿Cuan arraigado es el compromiso con el Medio Ambiente?

Esta pregunta que si bien resulta obvia, al pensar en la defensa de un bosque, espacio marino o en un especimen del monito del monte, se torna ambigua en el diario vivir de nuestro espacio cívico que es la ciudad.

En efecto, al caminar por la calle, vía pública por excelencia, patrimonio de transeúntes que deambulan hacia destinos diversos, es posible observar pilas de basura, papeles, botellas y un sinnúmero de elementos contaminantes que literalmente transforman en vertedero un espacio definido para transitar en armonía. Lo mismo, se puede decir de plazas, parques, entradas al metro, caminos y murallas en distintos puntos de la ciudad.

Lo anterior, no es la descripción posterior de alguna protesta, marcha con fines varios o encuentro de barras bravas (que pareciesen contar con alguna licencia para destruir y devastar a sus anchas), -No- Sino del reflejo cotidiano del comportamiento humano en su espacio de pertenencia inmediato; su Medio Ambiente Urbano .

Por ello, vale la pena preguntarse nuevamente; ¿Cuan efectivo es el compromiso con el Medio Ambiente?...

A mi modo de ver lo que existe es más una suerte de sentimiento vago, adornado de un discurso idealizado, que no obstante carece de sentido, proyecto y prácticas concretas en el día a día. Esto nos lleva a una sensación difusa, permeada de conceptos aleatorios y de cierta conveniencia que salvo excepciones como los ciclistas que si son visibles, organizados y que de manera progresiva han ido generando espacios, con un trabajo serio y adaptado a la convivencia pacífica, no encuentran réplicas visibles en quienes se definen como defensores del medio ambiente.

No deseo entrar en temas más precisos como evaluar el gasto de energía por personas, consumo de agua, existencia de reciclaje porque definitivamente allí encontraríamos al verdadero "Homo Chilensis" en gloria y majestad.

En efecto, lo que apreciamos es más bien una suerte de cubierta, retoque superficial aunque sin arraigo, mientras que la fase necesaria para un compromiso cabal de los ciudadanos requiere disponer en aquellos habitantes de un país, región o ciudad hacia un cambio principalmente a nivel personal y desde allí potenciar un proyecto de viabilidad, más que gritos, violencia o simples consignas. Esto en el presente no es así y por ello estimo que cualquier cambio debe ser inicialmente un desafío particular que entregue cierta coherencia con el discurso y luego pueda ser una alternativa para agrupaciones, grupos y comunidades.

No faltaran los que delegaran esta labor en las autoridades, quedando automáticamente eximidas de asumir su propio rol en medio de un debate que requiere seriedad y efectos prácticos, más que simples discursos con banderas enarboladas a manera de catarsis o carnavales terapéuticos.

Hasta el momento, lo que se puede apreciar es más bien una suerte de disociación con el entorno inmediato, indolencia ante la propiedad pública (de todos) y una fuerte tendencia a expresarse en códigos de violencia y destrucción. De ecológico muy poco, salvo una patrulla de niños exploradores que de vez en cuando planta algunos árboles en las laderas de los cerros o de voluntarios que concurren a limpiar las playas devastadas por los "humanos" que concurren a ellas, mientras los supuestos ecologistas mantienen su televisor o computador encendido en vistas a la próxima protesta.




Atte

viernes, 3 de junio de 2011

A las Parcas



Os pido un verano y un otoño más,

Poderosas, para lograr afinar mi canto,

y así satisfecho con este juego,

mi corazón se acerque al morir.

El alma que fue malograda aquí,

no encontrará descanso ni en el Orco,

pero puedo concretar lo más deseado

y sagrado de entre todo, la poesía,

entonces reiré dichoso a las crueles

sombras, aunque debiese abandonar

en la entrada mi voz. Un día solamente

habré vivido con los dioses. Eso

me alcanza.

(Hölderlin)


El verso escurre, declama y aspira a un lapsus de nuevo tiempo para entregar su fruto maduro, en este poema del alemán Hölderlin, se rescata la vivencia profunda de quién sabe que su viaje se encuentra cerca del final (quizás lo intuya más cerca de lo real ) y así más pide clemencia a las artífices del destino con el afán de entregar lo mejor de sí.

De esta forma, quién transcurrió parte relevante de su vida encerrado en un torreón, observando y avizorando a su amada Diotima, entregando versos con registros fechados cien años antes o discurriendo crípticos mensajes hacia la naturaleza, nos entrega un elemento vital de sentimiento hacia la vida, más allá de todo, está el deber de cumplir con aquello que nos hemos consagrado.......