miércoles, 10 de abril de 2024

Nuevamente Sueños y realidad

El profundo mundo de los sueños, aquél que nos aguarda cada noche,

Ese que nos inunda de sensaciones diversas y realidades aparentes, se presenta como una suerte de ciclo.

En cada día con escenarios distintos.

De tal forma, se hace posible encontrarme con mi padre

No es un sueño similar a otros, como una niebla densa, extendida e incierta

En este caso, es una suerte de filme de calidad, nítido, prístino

Donde la interacción es de una realidad,  -diríamos real- 

Mi padre acompañado con mi madre, se aprestan a retornar de un viaje, ambos visten formales

Entablamos una conversación coloquial con mi padre, lo que más me impacta del proceso es la claridad y realismo.

Las emociones que pueden surgir de un dialogo familiar afectuoso están ahí

De pronto el viaje de ambos me inquieta

Le consulto a mi padre.

Es un viaje algo anticipado, así lo deja entrever, quién me señala: -"Tu mamá así lo ha decidido"-

En un momento, este esquema de diálogo se corta en un instante desde mi propia conciencia

Observo la escena; -mi padre de terno, no más de 60 años, activo y dispuesto al viaje con mi madre.-

En mi mente surge intempestivamente la idea, luego la convicción que se impone como una suerte de máxima racional, que indica: "-Mi padre está muerto, por tanto estoy soñando"-

Dos eventos me conmueven. El primero, asumir que "supuestamente" ese no es mi padre, y que estoy soñando, aunque de alguna forma si lo sea. El segundo, es constatar que me encuentro en una perfecta recreación, que para mí unos segundos antes era realidad. 

Constatar vivir un sueño es una experiencia no menor y tener que salir de esa ilusión, tampoco..

Es como encontrarse en una suerte de programa que permite interacciones posibles con realidad efectiva y sin embargo saber a la vez que aquello es una recreación. No es por tanto una mera ilusión o alucinación, sino la vivencia de la fusión de conciencia y fantasía.

Ante esa reacción, no alcanzo a procesar más, y de pronto, casi como si un dispositivo desconocido se activara, despierto.

 -No hay ansiedad, tampoco tristeza- Sólo el constatar que he despertado, una duda subyace ante esa constatación: ¿ Es esta realmente a la realidad?




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